Bloomberg — Intel Corp. (INTC), el mayor fabricante de procesadores informáticos, arrastró a la baja las acciones de la industria de chips luego de que sus ejecutivos dijeron que una economía más débil afectará la demanda y perjudicará el rendimiento financiero.
“Creo que en el lado macro, claramente, es más débil”, dijo el martes el director financiero Dave Zinsner en una conferencia de Bank of America. “Eso claramente nos va a impactar, y prácticamente a todos los demás no solo en la industria de semiconductores sino a nivel mundial en términos de corporaciones”.
Los comentarios de Zinsner se sumaron a la preocupación de que la creciente demanda de semiconductores y productos electrónicos en general se verá frenada por la inflación y el gasto más débil de los consumidores y las empresas. Zinsner rechazó actualizar las proyecciones de la compañía para la segunda mitad del año, pronósticos que algunos analistas ya habían proyectado eran demasiado optimistas.
Los productos de la compañía con sede en Santa Clara, California, son el corazón de la mayoría de las computadoras personales del mundo y son el componente clave en la mayoría de los servidores que ejecutan centros de datos y redes corporativas.
Las acciones de Intel cayeron un 5,3% a US$41,23 al cierre del miércoles en Nueva York, el precio más bajo desde octubre de 2017. La caída de Intel arrastró a la baja a las acciones de la industria de semiconductores. Advanced Micro Devices Inc. cayó un 3,2%, mientras que Nvidia Corp. (NVDA) cayó un 1,5%. El índice de semiconductores del mercado de valores de Filadelfia cayó un 2,4%.
En abril, Intel dio un decepcionante pronóstico de ventas y ganancias para el segundo trimestre, lo que indica una demanda más débil de todos los tipos de sus semiconductores. Los ingresos por chips de PC cayeron en el primer trimestre, ya que algunos clientes redujeron los pedidos para reducir el inventario no vendido y los consumidores compraron menos dispositivos con fines educativos, dijo Intel en ese momento. No obstante, los ejecutivos de Intel se mantuvieron firmes en las proyecciones anuales que argumentaban que la demanda mejoraría en la segunda mitad del año.
“Creo que esperaremos para dar un número firme cuando obtengamos todos los datos de este trimestre”, dijo Zinsner en la conferencia. “En este punto, solo diría que se ha vuelto mucho más ruidoso de lo que era incluso hace un mes”.
