De manera unánime, el Consejo del Banco Central de Chile decidió incrementar las tasas de interés de política monetaria en 75 puntos base, hasta el 9%. El emisor chileno señala que sigue habiendo riesgos de que la inflación siga aumentado -alcanzó el 10.5% anual en abril- y la expectativas del crecimiento mundial se han deteriorado.
“La inflación mundial y sus perspectivas han seguido subiendo, dando cuenta de aumentos de precios más generalizados y persistentes. Destaca el impacto de la prolongación de la invasión de Rusia a Ucrania en el alza de los precios de las materias primas, especialmente la energía y los alimentos, previéndose que se mantendrán altos por un tiempo prolongado”, señala el Banco.
De igual manera, llama la atención de que la economía chilena está retrocediendo a una velocidad menor que la esperado, gracias al consumo que se ha mantenido en niveles elevados.
“En el primer trimestre, la serie desestacionalizada del PIB no minero cayó 0,2% trimestre a trimestre, descenso menor a lo previsto en el IPoM de marzo. En abril, el componente no minero del Imacec sorprendió al alza. Los datos parciales del segundo trimestre confirman la fortaleza del consumo, mientras que la inversión sigue debilitándose”, explica el Banco.
En otros indicadores, el Banco Central reseñó que “el mercado financiero nacional ha mostrado un desempeño más favorable que sus pares externos. Las tasas de largo plazo han retrocedido respecto de la reunión pasada, volviendo a niveles similares a los de fines de marzo”.
Felipe Hernández, economista de Bloomberg Economics, asegura que en perspectiva hay al menos dos subidas más de 25-50 puntos básicos, en función de la nueva información que reveló este martes el emisor.
El tipo de interés ajustado a las expectativas de inflación a un año se sitúa en el 2,6%, frente al 2,1% de la reunión anterior y se compara con la tasa neutra que el banco central estima en el 0,5%.