Bloomberg — Muchos jefes han anhelado tener alguna herramienta para hacer que más trabajadores vuelvan a trabajar de manera presencial. La preocupación por la recesión, la congelación de las contrataciones, ambas ilustradas en palabras de la persona más rica del mundo pueden haber hecho que ese objetivo se vuelva más fácil.
Durante más de dos años, millones de trabajadores de cuello blanco de empresas como Apple Inc. o American Express Co. se han acostumbrado a una mayor flexibilidad laboral, y un mercado al rojo vivo les ha dado licencia para rechazar los pedidos de los CEOs de volver a la rutina previa a la pandemia. Pero ahora, el temor a una recesión ha enturbiado las perspectivas de las empresas. En consecuencia, algunas han reducido las contrataciones y parado los aumentos de sueldo, mientras que otras han comenzado a realizar despidos, lo que revela los primeros signos de una mayor igualdad de condiciones entre empleados y empleadores.
La reciente exigencia de Elon Musk de que todos los empleados de Tesla Inc. vuelvan a trabajar de manera presencial o dejen la empresa lo ha convertido en la nueva figura visible del movimiento que pregona la vuelta a la oficina. Sus palabras contra el trabajo remoto podría animar a otros a actuar en esa misma línea.
La mitad de los empresarios esperan trabajar siempre de manera presencial dentro de un año, según una nueva encuesta de la aseguradora Nationwide. Los acontecimientos ponen de relieve los debates en las juntas directivas de todo el mundo sobre cómo se desarrollará esta nueva era del trabajo híbrido, y plantean la preocupación de la posibilidad de que algunas empresas puedan utilizar el nerviosismo económico como excusa para deshacerse de los trabajadores que se niegan a volver a la oficina.
“Los trabajadores han tenido la ventaja durante el transcurso de la pandemia”, dijo Andrew Challenger, vicepresidente senior de Challenger, Gray & Christmas, una empresa de recolocación y entrenamiento de ejecutivos. “Las empresas siguen reteniendo a los trabajadores, pero estamos empezando a ver un repunte en el movimiento de despidos. La demanda de trabajar de manera presencial podría ser, sin dudas, una forma de recortar a esos trabajadores de forma voluntaria. Incluso si no se produce una recesión, los empresarios podrían empezar a hacer demandas similares a las que ha hecho Elon Musk”.
Los más recientes datos de empleo muestran que la contratación continuó a un ritmo saludable en mayo en EE.UU., y grandes empleadores como International Business Machines Corp. dicen que no han visto signos de desaceleración.
Ford Motor Co. está invirtiendo US$3.700 millones en fábricas en tres estados del Medio Oeste del país, parte de una amplia expansión que creará 6.200 puestos de trabajo sindicalizados. En abril había casi dos puestos de trabajo por cada desempleado. Conscientes de ello, muchas empresas han optado por no imponer exigentes mandatos de regreso a la oficina, mientras que otras han flexibilizado sus políticas en las últimas semanas.
Por ejemplo, Apple acaba de dar marcha atrás en un plan para que los trabajadores estén tres días a la semana en la oficina después de que algunos empleados se quejaran. Incluso los jefes de Wall Street han reducido sus exigencias. El CEO de JPMorgan Chase & Co., Jamie Dimon, dijo que alrededor del 40% de su plantilla trabajará de manera híbrida en el futuro, y el jefe de Credit Suisse Group AG, Thomas Gottstein, dijo también que no cree que los bancos vuelvan a trabajar a tiempo completo desde la oficina.
“La gente ha pasado más de dos años demostrando que puede ser productiva trabajando desde casa”, dijo Brian Elliott, que dirige una encuesta continua de más de 10.000 trabajadores de cuello blanco en un consorcio de investigación respaldado por Slack Technologies, una unidad de Salesforce Inc. “A medida que las empresas obligan a los empleados a volver a la oficina cinco días a la semana, hemos visto que los niveles de estrés de los trabajadores se disparan y el equilibrio entre la vida laboral y la personal se desploma. Las personas que no están satisfechas con su nivel de flexibilidad en el trabajo son tres veces más propensas a buscar un nuevo empleo.”
Apple lo aprendió por las malas cuando uno de sus principales expertos en aprendizaje automático abandonó la empresa el mes pasado por su política de retorno a la oficina, para acabar en su rival Alphabet Inc. Pero no toda la rotación de personal en el sector tecnológico, tan castigado, es voluntaria: las preocupaciones por la seguridad laboral pueden llevar a los trabajadores a sacrificar parte de su estilo de vida a distancia para pasar tiempo con sus jefes. En mayo se produjeron más despidos en las empresas tecnológicas que en los cuatro primeros meses del año juntos, según el rastreador de datos Layoffs.fyi. Empresas como Netflix Inc., Klarna Bank AB y Robinhood Markets Inc. están despidiendo a gente y las startups cuyo límite era el cielo han pasado del modo de crecimiento al de supervivencia.
El informe de empleo del viernes en Estados Unidos mostró que los despidos en Silicon Valley se extendieron a sectores como el comercio minorista y los fabricantes de automóviles. Pero algunos expertos no están convencidos de que la tendencia vaya a ser generalizada. “El pánico me parece exagerado”, dijo AnnElizabeth Konkel, economista del sitio de empleo Indeed.com. “Lo veo como un pequeño estruendo, pero no como una auténtica tormenta”.
Sin embargo, los indicios son cada vez mayores. Los beneficios de las empresas se ven amenazados por el aumento de la inflación y los problemas de las cadenas de suministro, mientras que el aumento de los salarios y los costos de las materias primas han recortado los márgenes de beneficio, dejando a las empresas poco margen de maniobra. Algunas como Deere & Co., Gap Inc. y Walmart Inc. y Target Corp. han dicho a los inversores que esperan más situaciones de esta naturaleza durante el transcurso del año. Las acciones están oscilando, y el mes pasado el índice de referencia S&P 500 se sumergió brevemente en un mercado bajista. El temor a que las subidas de las tasas por parte de la Fed lleven a la economía a una recesión preocupa a los accionistas, a medida que el aumento de los precios de los alimentos y de la gasolina afecta a los consumidores.
El entorno cada vez más inestable puede hacer que algunos se lo piensen dos veces antes de dejar su actual trabajo. No obstante, al mismo tiempo los CEOs que sigan ciegamente la exigencia de trabajo presencial de Musk podrían recibir una dura lección sobre las nuevas reglas del trabajo. Sólo el 11% de los más de 50.000 trabajadores de 44 países encuestados por la consultora PwC preferiría trabajar en persona todo el tiempo. Sin embargo, los trabajadores totalmente remotos también son una minoría, y dos tercios de ellos se preocupan por perder oportunidades de desarrollo profesional, según PwC.
Los modelos de trabajo híbridos son muy variados, por lo que, a medida que las empresas descubren lo que más les conviene, los expertos prevén un entorno de contratación más equilibrado.
“Seguimos teniendo escasez de mano de obra, pero hay indicios de que estamos pasando a un mercado más normal, en el que los trabajadores entran por una puerta y salen por la otra”, dijo Challenger.