Guatemala — Con la llegada de la crisis sanitaria del Covid-19 las empresas se vieron impulsadas a comenzar un proceso acelerado de transformación digital, pero ¿qué es realmente la transformación digital? ¿alcanza sólo con generar nuevas tecnologías en los productos o servicios?
Irene Kopper, VP de Desarrollo y Crecimiento de ADEN Educational Group, comentó a Bloomberg Línea, que la primera etapa que vivieron las empresas con la pandemia fue como un “balde de agua fría”, que alcanzó a todos los departamentos de las organizaciones y también a los consumidores, quienes se fueron adaptando a los cambios.
Las empresas tuvieron que hacer transformaciones de “shock”, como las calificó Kopper, y tomaron acciones rápidas para poder implementar el teletrabajo, es decir, si contaban con una plataforma para integrar los procesos y cerrar brechas en la parte digital.
“Algunas parecían estar bien o ya las tenían adelantadas, pero, en ese momento, notaron que había brechas desde algo muy simple como computadores que se adaptaran a las necesidades del trabajador, hasta situaciones complejas como temas de servidores, servicios en la nube, y otros”, explicó la profesional.
Importancia del reskilling
Por otro lado, quienes no se adaptaron, ya cerraron sus negocios, y actualmente, en una era poscovid observan hay necesidad de volver a ser “flexibles y mantener el equilibrio para poder mantener a los empleados motivados y lograr los resultados deseados”, enfatizó.
Por un lado, tenemos una solución muy digital, por otro lado, otra más personalizada enfocada a los clientes. En ese sentido, la capacitación es muy importante e implementar el reskilling para mejorar las competencias y potencializarlas.
“Capacitar a todos los involucrados, no solo como tema de la transformación digital, sino de la toma de decisiones y por qué se están implementando las herramientas”, recomendó Kopper.
- La motivación es clave para generar cercanía y volver a crear la “love mark” dentro de la empresa. Aunque se tengan todos los sistemas, el contacto no podrá remplazar el contacto humano.
- Es así como el desafío está en los equipos y en cómo mantenerlos en un alto desempeño con las nuevas estructuras tecnológicas.
- Tener claro el modelo más productivo e implementarlo.
- Revisar los sistemas actuales, si todos están en sintonía, si la empresa está llegando al cliente o hay alguno que no se esté tomando en cuenta.
Tres pilares vigentes
Andrés Roa, profesor del Faculty de ADEN dijo a Bloomberg Línea que actualmente la mayoría de los CEOs y líderes de las empresas no logran entender todavía qué es la transformación digital y por dónde comenzar.
“Todos hablamos de innovación y transformación digital, pero, la mayoría de personas enumeraran acciones de lo que hay que hacer, sin fundamentos teóricos y empiezan a suponer”, señaló el catedrático.
Según Roa, “suponer” es uno de los graves errores de las organizaciones, porque “cuando suponemos nos perdemos, porque empezamos a tomar decisiones improvisadas, y eso trae más problemas, es necesario entender cuáles son las necesidades de nuestro cliente, llegar con una propuesta de valor y mejorarla, crear nuevas actividades apuntando a las necesidades del usuario”.
Por lo anterior, es importante conocer los 3 pilares que mantienen vigente a la transformación digital:
- Transformar el pensamiento de los líderes empresariales a través de la creatividad y organización.
- Modelar una cultura dentro de los ecosistemas digitales, y que estén liderados por un grupo conformado de los diferentes departamentos.
- Conectar herramientas digitales con los objetivos estratégicos de la organización y con los clientes.
En este pilar, si los líderes no logran entender el mensaje no se enviará bien a los diferentes equipos, porque deben comprender que las herramientas digitales no son lo más importante del negocio, sino brindar herramientas adaptadas al enfoque del negocio y a las necesidades de los clientes.
El principal error que están cometiendo las empresas es que quieren verse “sexys”. Esto significa, que quieren tener lo último en digitalización, pero no están conectando esas herramientas con los objetivos estratégicos de la organización, y menos con los clientes.
Rediseñar sin perder la esencia
En opinión de Roa, el rediseño del modelo de negocio no significa cambiar su esencia, sino ver qué herramientas lo acompañan para lograr los objetivos estratégicos.
Sin embargo, hay una brecha generacional que está impactando, porque las organizaciones están lideradas por baby boomers y generación X, y como no nacieron en era digital no tienen esa cultura, al mismo tiempo, están ingresando a las compañías mileniales y centenials.
“Unos tienen experiencia y otros las herramientas, por lo tanto, hay que crear valor y eso es lo que lleva a las compañías a la era digital”, afirmó el profesor de Aden.
La transformación digital no es inmediata y no se logra solo porque la empresa compró una plataforma, la verdadera transformación se logrará cuando el grupo generacional y el talento humano, junto con los directivos logren avanzar con un pensamiento y cultura innovadora.
“El tema de desaprender no es fácil, estamos hablando de personas que tienen que desaprender el modelo de negocio anterior para rediseñar uno nuevo, les dolerá un poco, pero, para quienes vienen será muy fácil adaptarse porque en su cerebro ya está implantado el tema digital”, agregó Roa.
El cliente es el centro, y es urgente identificar sus necesidades para plantear una propuesta de valor para definir cuál será su nueva experiencia con algunas herramientas digitales.
La transformación digital debe arrancar, porque muchas no han empezado, están caminando por el valle de la muerte y están perdidos, los que ya iniciaron deben encontrar el foco estratégico y abordar su propio camino.
Conectar con el cliente
El mundo de los canales digitales es otro factor importante, pero si los clientes no se conectan con la empresa no se forman vínculos.
Las generaciones actuales están inmersas en las redes sociales, y hay que entenderlos para así mejorar el servicio y averiguar cuál es la estrategia onminacal a desarrollar, es decir, todos conectados con una sola estrategia.
Lo que hacen la mayoría de líderes empresariales es “disparar perdigones tecnológicos”, pero lo único que logran es presionar a otros con una cantidad de herramientas, que no comprenden y los ahogan. “Ahí es donde se pierde el talento y es cuando se va a otra compañía”, expresó Roa.
Los líderes y Junta Directiva están tomando decisiones pensando en el pasado y lo único que lograrán es proyectar algo que no genera valor, hay que aumentar el coeficiente digital y así los líderes llevarán un mensaje claro que llevará a la compañía hacia un objetivo estratégico.
No son las herramientas lo más importante, hay que investigar las tendencias a nivel de cada modelo de negocio, cuál es la que está fuerte, tenerla de vista, no perderse, porque si no las sigo, aparecerá alguien con mi mismo modelo, “pero mejorado y me sacará del mercado”, concluyó el catedrático de Aden.