Bloomberg — El banco más grande de América Latina parecía estar perdiendo la carrera contra una serie de incipientes fintechs cuando Milton Maluhy asumió como CEO el año pasado.
Itaú Unibanco Holding SA (ITUB) se había desplomado casi un 35% en los dos años anteriores, perdiendo $130.000 millones de reales (US$25.000 millones) en valor de mercado, mientras que competidores digitales como StoneCo Ltd. (STNE) subían. El mayor temor de los inversionistas era que la compañía de Maluhy se quedara atrás, que se transformara en un dinosaurio que no logró seguir el ritmo de la revolución digital.
No resultó de esa manera. El aumento de las tasas de interés y la reducción de la liquidez global están afectando las valoraciones de las fintech, mientras que los incondicionales de la industria como Itaú se consideran apuestas más seguras. Y así, después de 15 meses en el cargo, Maluhy puede presumir de un repunte en el precio de las acciones de un 18% este año, un aumento de los dividendos y una lista de adquisiciones que, según el CEO, modernizarán al gigante bancario de casi 100 años.
Mientras tanto, firmas de tecnología financiera como Stone y Nu Holdings Ltd. (NU) han caído hasta un 50% este año debido al escepticismo de que puedan cumplir sus promesas de crecimiento.
“Las altas tasas de interés y la menor demanda de crédito requerirán que los bancos tengan mucha resiliencia operativa”, dijo Maluhy, de 45 años, en respuesta a preguntas enviadas por correo electrónico, su primera entrevista con medios internacionales desde que se convirtió en CEO. “Eventualmente favorecerá a quienes acumularon más conocimiento sobre el mercado y tienen una estructura de capital sólida”.
El máximo ejecutivo de Itaú, que comenzó en el banco en 2002 y ha ocupado puestos en todas las áreas, desde cambio de divisas y tesorería hasta tarjetas de crédito, está impulsando aún más cambios, y quiere avanzar rápido.
“Necesitamos construir una organización más simple, más ágil y eficiente”, dijo Maluhy, quien anteriormente lideró cambios en las operaciones de Itaú en Chile y Colombia. “Nuestro enfoque es acelerar cada vez más esta transformación cultural y digital”.
Con ese objetivo en mente, el banco ha vuelto a buscar adquisiciones y asociaciones. Y las está persiguiendo agresivamente: los analistas de Banco BTG Pactual SA (BPAC11) dijeron que Itaú está en “modo de ataque” en el sector de tecnológico.
Si bien los reguladores han dejado en claro que prohibirían las compras directas de instituciones financieras, el banco está encontrando formas de llegar a acuerdos. Itaú desembolsará hasta $1.000 millones de reales en un proyecto conjunto con Totvs SA (TOTS3), que ofrece un software que ayuda a las empresas a administrar sus negocios. Y se asoció con Locaweb Servicios de Internet, un proveedor de servicios web, y Omie, que ofrece programas de gestión empresarial.
El objetivo es liderar el proceso de transformación digital a través de inversiones y, sobre todo, a través de un cambio cultural dentro del banco, señaló Maluhy.
Aun así, persisten preguntas sobre cómo le irá al banco frente a los vientos en contra en el horizonte.
“La competencia más dura en la industria fintech seguirá siendo un riesgo clave en términos de comisiones para Itaú, especialmente para su negocio de tarjetas”, dijo Diksha Gera, analista de Bloomberg Intelligence. La economía en crisis de Brasil y la incertidumbre política también pesarán sobre el crecimiento, dijo.
Maluhy, quien es miembro del consejo asesor de Bloomberg New Economy Gateway Latin America, también ofreció sus puntos de vista sobre otros temas:
Perspectivas de Brasil
“La guerra en Ucrania ha provocado un aumento en los precios de las materias primas, lo que significa más inflación en todo el mundo”, dijo Maluhy. “Pero también da como resultado una actividad económica más fuerte en países productores de materias primas, como Brasil.
“Creemos que el banco central tendrá que subir la tasa Selic aún más para contener este nuevo choque inflacionario, y el contexto de endurecimiento monetario en Estados Unidos solo contribuye en esta dirección. El aumento de las tasas en EE.UU. debería ejercer presión sobre los tipos de cambio en los mercados emergentes”.
Planes para América Latina
“Nuestra mayor oportunidad radica en expandir las operaciones que ya tenemos en Brasil y otros países de América Latina”, dijo. “Tenemos operaciones en Chile, Colombia, Perú, Uruguay, Argentina y Paraguay, que están dando resultados y mostrando avances importantes.
“Nuestra prioridad con las operaciones internacionales ha sido generar valor para nuestros accionistas. Las adquisiciones fuera de Brasil, debido a la asimetría cambiaria e impositiva, tienden a requerir una gran asignación de capital, lo que impacta negativamente en el compromiso con los accionistas”.
Gastos
“Nuestro enfoque está en la eficiencia, no simplemente en la reducción de costos”, dijo el CEO. “Durante los últimos años, hemos estado revisando cómo implementar mejor nuestros recursos y adaptarnos. Tomemos el número de empleados: a fines de 2018, teníamos 86.800 empleados directos en Brasil. En diciembre de 2021, ese número aumentó a 87.340, con énfasis en la contratación de profesionales del área de la tecnología”.
Sucursales
“La sucursal bancaria física ha recuperado un papel importante y ha demostrado ser un activo valioso para nosotros en el servicio a nuestros clientes, especialmente en la oferta de productos más complejos y sofisticados, como el financiamiento de bienes raíces”, sostuvo Maluhy. “Nuestro objetivo es combinar cada vez más el servicio remoto y el físico”.
Tamaño y alcance
“Itaú tiene la cartera de productos y servicios financieros más completa del mercado, más grande que cualquier otro actor, ya sea tradicional o fintech”, dijo. “Nuestra base de clientes activos es sólida, con casi 60 millones de personas y empresas. Tenemos alrededor de 3 billones de reales en activos bajo custodia y 1 billón de reales en crédito otorgado”.
Con alrededor de 70 petabytes de datos, Itaú “está en un viaje de modernización de nuestros sistemas y migración a la nube a gran escala”, dijo.
