Bloomberg — Los Ángeles, la segunda ciudad más grande del EE.UU., con 4 millones de habitantes, está ordenando a sus residentes que no rieguen el césped más de dos días a la semana, en lugar de tres, a medida que la sequía se hace más fuerte en California.
La norma propuesta para los clientes del Departamento de Agua y Energía de Los Ángeles requiere la aprobación del ayuntamiento. Entraría en vigor el 1 de junio, según un comunicado enviado por correo electrónico.
“Si queremos que nuestros hijos y nietos puedan acudir al grifo con confianza, tenemos que redoblar las soluciones que han hecho de la conservación una forma de vida en Los Ángeles”, dijo el alcalde Eric Garcetti en el comunicado.
En todo el estado los gobiernos están adoptando medidas similares para hacer frente a la posible escasez de agua. El Distrito Metropolitano de Agua del Sur de California, una cooperativa establecida por el estado que suministra agua a 19 millones de personas en seis condados, dijo el mes pasado que un tercio de los residentes de la zona se enfrentan a nuevas restricciones que limitan el riego al aire libre a un día a la semana.
Gracias a las medidas de conservación iniciadas en la década de 1970, Los Ángeles utiliza menos agua per cápita que hace 50 años, y su consumo ha disminuido más de un 40%.
Este artículo fue traducido por Andrea González