Bloomberg — El sentimiento prominería de las autoridades argentinas en un evento de la industria esta semana subraya el cambio de suerte de lo que se consideró una apuesta mucho más arriesgada que la de otras naciones ricas en minerales en América Latina. Al tiempo que Chile y Perú discuten aumentos de impuestos, estándares ambientales más estrictos e incluso la posibilidad de restringir los derechos de propiedad privada, el ministro de Producción de Argentina, Matías Kulfas, dio la bienvenida a las tan necesarias divisas fuertes que trae consigo la minería.
“Necesitamos más inversión y exportaciones, porque bien sabemos que casi todas las crisis económicas que tuvieron lugar en los últimos 80 años se originaron en la falta de divisas”, dijo Kulfas a 400 funcionarios y ejecutivos mineros reunidos el martes en Buenos Aires. “Sin dudas, el desarrollo de la minería es parte de la solución a los problemas en nuestro país”.
Sin duda, la inclinación proteccionista y el pasado políticamente volátil de Argentina significan que sigue siendo un lugar complicado para hacer negocios. Pero la nación con escasez de efectivo ahora está recurriendo a medidas como las lagunas en el control de capital y beneficios fiscales para impulsar el atractivo de desarrollar más de sus vastos depósitos de litio y cobre hoy en día necesarios en la transición de energía limpia.
Al mismo tiempo, Chile está redactando una nueva Constitución que podría obstaculizar las inversiones, mientras que los políticos en Perú buscan una mayor participación de las ganancias mineras para impulsar el gasto y aliviar las presiones sociales. Mientras tanto, México avanza hacia el control estatal de sus recursos de litio.
Todo eso está sacando a Argentina de las sombras de sus vecinos más queridos. El ministro Kulfas dijo que las exportaciones de minerales podrían aumentar cinco, seis o siete veces desde los US$3.300 millones del año pasado.
“Para medir nuestro potencial, solo necesitamos mirar a Chile, que comparte los Andes pero cuyas exportaciones de minerales son 20 veces más grandes”, dijo Franco Mignacco, quien preside la cámara minera Caem y es director general de Minera Exar SA, que está a punto de convertirse en la próxima operación productora de litio de Argentina. “¿Podemos realmente igualar ese desarrollo? La respuesta es un ‘sí’ de todo corazón”.
En los últimos nueve meses, Rio Tinto Group, con sede en Londres, Lithium Americas Corp. con sede en Vancouver, Posco de Corea del sur y Zijin Mining Group Co. de China se han comprometido con inversiones en litio argentino.
Como evidencia adicional del creciente atractivo de Argentina como jurisdicción minera, Mignacco señaló una cartera de proyectos de cobre, incluido Josemaría, recientemente adquirido por Lundin Ming Corp., Los Azules de McEwen Mining Inc. y El Pachon de Glencore Plc, y cinco proyectos de plata en diferentes etapas de preproducción