San Pedro Sula — El cantante Alejandro Sanz y la marca española de botellas de hidratación Quokka crearon dos botellas cuyas ventas irán destinadas al proyecto de la oenegé Ayuda en Acción para frenar la desforestación de manglares en Honduras.
Con la venta de estas botellas, la iniciativa pretende conservar y reforestar 250.000 hectáreas de manglar, también conocidos como bosques azules, en La Mosquitia hondureña.
Según explicó Quokka en un comunicado, a partir del proyecto buscarán evitar la emisión de 1.150.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera durante los próximos 30 años. Los resultados de la campaña serán certificados oficialmente por South Pole, empresa dedicada al desarrollo de soluciones climáticas.
Las botellas de acero inoxidable están disponibles en color negro o con estampado tropical en tonos azules y ambas de edición limitada tienen una capacidad de 630 mililitros y cuentan con el logotipo de Alejandro Sanz grabado, en color plateado. Las botellas ya están en la web de Quokka a un precio de venta al público de 19.90 euros cada una.
Quokka es una marca que promueve botellas reutilizables para acabar con los plásticos de un solo uso; y apoya a las comunidades menos favorecidas, colaborando con proyectos solidarios relacionados con el agua y la sostenibilidad.
“Es un privilegio contribuir a esta causa y hacerlo con figuras tan comprometidas con el planeta como Alejandro Sanz y Ayuda en Acción”, afirman ejecutivos de la empresa española.
Escudo contra el cambio climático
Los manglares son formaciones vegetales leñosas y densas, ubicadas en zonas pantanosas de transición entre el medio terrestre y acuático, en la desembocadura de cursos de agua. A estos ecosistemas marinos se les considera un escudo contra el cambio climático, al almacenar hasta diez veces más carbono que los terrestres.
Ayuda en Acción trabaja en Honduras desde 1998 con iniciativas enfocadas a mejorar el entorno en el que viven miles de niños y niñas. En años recientes, el trabajo se ha intensificado en áreas donde la mayoría de la población es indígena, como La Mosquitia, un lugar donde el 53% de la población vive por debajo del umbral de la pobreza.
Sin embargo, también hay una riqueza natural debido a sus manglares. “Gracias a los proyectos de conservación que llevamos a cabo y a esta colaboración, conseguiremos dar un presente y un futuro digno a las personas por y con las que trabajamos”, dijo Marta Marañón, directora de Relaciones Institucionales en Ayuda en Acción.