Mayor inflación de 22 años en Colombia revive debate del ritmo de alza de tasas

La Junta decidió desde enero que los aumentos se realizarían de a 100 puntos básicos. El reciente dato de inflación reabre el debate de la velocidad del ajuste

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Bogotá — La inflación en Colombia no da tregua. En abril la variación anual subió al 9,23% y sorprendió nuevamente al mercado financiero colombiano que la esperaba cerca del 8,8%.

Entre tanto, las expectativas de inflación han estado incrementándose mes tras mes, pese a ello, están ancladas (por debajo de 4%) en la medición a 24 meses. Además, la proyección para dentro de 2 años es menos de la mitad de la inflación anual actual (9,23%).

En reiteradas oportunidades la Junta Directica del banco central colombiano ha manifestado su interés por realizar un ajuste gradual en los tipos de cambio. Tras una primera alza de 50 puntos básicos en septiembre del año pasado, los integrantes de la autoridad monetaria decidieron acelerar el ritmo del ajuste a 100 punto básicos.

Pese a ello el mercado especuló en el inicio del 2022 que ese nivel podría seguir aumentando dado que la inflación consistentemente sorprendió al alza, lo cual el gerente general, Leonardo Villar, dijo en su momento que no afectaría el ritmo del ajuste dado que las decisiones de política no tenían efecto en el mes inmediatamente siguiente sino que era decisiones pensadas para periodos de 6 meses en adelante.

Para Felipe Campos, director de Investigaciones Económicas de Alianza Valores, el comportamiento reciente de la inflación, que nuevamente sorprendió al alza, da para que “la Junta del Banco de la República reevalúe el ritmo al que está realizando los aumentos de tasas y considera la posibilidad de subirla en 150 puntos básicos”.

El más reciente dato de inflación que entregó el Dane, dejó ver que no solamente los alimentos están impulsando el crecimiento de la inflación anual, sino que desde otros grupos también se está generando un alza consistente.

Sergio Olarte, encargado de Investigaciones Económicas en Scotiabank Colpatria, aseguró que “la inflación muestra que el aumento es muchísimo más que por alimentos, la de sin alimentos y regulados o la de sin alimentos y energéticos ya está por encima del 5,4%, entonces, a pesar de que se puede desacelerar ese proceso va a ser muy lento”.

En ese sentido Olarte considera que no solamente se vio sorprendido el mercado, sino que probablemente “también el staff del banco se debió ver sorprendido, en un análisis de función de Taylor sí da para pensar que se deban subir más de 100 básicos, pero esto va a pasar hasta junio, porque en mayo no hay decisión”, agrega Olarte.

Y es que hay que tener presente que la decisión de junio, cuando vuelve a tomarse medida monetaria y para entonces, el Dane ya habrá revelado el dato de crecimiento económico del primer trimestre del año.

“Falta mucho tiempo, toca esperar a ver el efecto de esa inflación en la economía, si fuera solo por inflación da para que suban 150 básicos, pero si la economía se empieza a desacelerar, de pronto no se necesita. Quizá la suban más despacio, pero la dejan arriba más tiempo, un año quizá, depende”, aseguró el economista del Scotiabank Colpatria.

Campos por su parte dice que “el tiempo depende de la persistencia en esos niveles y yo creo que si la inflación no se devuelve rápido en el 2022 lo hace en el 2023. Yo creo q baja tasas en el segundo trimestre del 2023″.

Para Daniel Velandia, encargado de Investigaciones Económicas en Credicorp Capital, dice que “la continua fortaleza del IPC podría inclinar la balanza de votos en la junta del Banco de la República, por lo que una subida de tipos de 125-150 puntos parece el escenario más probable para la reunión de junio-22 (el IPC de mayo de 2022 también se conocerá para entonces) tras tres subidas consecutivas de 100 pb. En consecuencia, creemos que el tipo de política monetaria podría alcanzar el rango 8% a 8,50% en los próximos meses”.

Así las cosas el próximo 16 de mayo será clave, pues ese día se entregará la información de la actividad económica de los primeros tres meses del 2022 y a partir de ahí los codirectores del Emisor comenzarán a construir su visión de la política monetaria para la reunión de cierre del primer semestre.