Bloomberg — Los bancos europeos están calculando los crecientes costos de la invasión rusa de Ucrania ya que la guerra hace subir los precios de las materias primas e interrumpe las cadenas de suministro de las empresas.
Dirigidos por Societe Generale SA (SCGLY) y UniCredit SpA (UCG), los prestamistas de la región han señalado que hasta ahora están perdiendo cerca de US$9.600 millones, principalmente por reducir el valor de sus operaciones en la región y reservar dinero como escudo contra las ramificaciones económicas esperadas. Los últimos bancos en sumarse a la cuenta, ING Groep NV (INGA) e Intesa Sanpaolo SpA (ISP), informaron el viernes que la exposición a Rusia redujo los ingresos netos combinados del primer trimestre en casi US$2.000 millones.
Durante años, los bancos de Europa se beneficiaron del rápido crecimiento en Rusia, pero los costos asombrosos ahora significan que muchos prestamistas consideran que ya no vale la pena hacer negocios en el país más sancionado del mundo. Varios más también advirtieron que es posible que tengan que descartar sus perspectivas para el año si el lastre de la guerra en la economía global empeora. En este sentido, Intesa recortó su objetivo de ganancias para 2022 y advirtió que un escenario “muy conservador” prevé un golpe aún más duro.
Frente a esta extrema incertidumbre, los directores de riesgos de varios de los principales prestamistas europeos están celebrando reuniones entre ellos y con los reguladores para discutir la confiabilidad de sus modelos y provisionamiento, según personas familiarizadas con el tema. Un funcionario regulador, que habló bajo condición de anonimato, dijo que los bancos probablemente guardarán más fondos en los próximos trimestres.
“Las insolvencias corporativas en nuestros mercados probablemente aumentarán” este año debido al aumento de los precios de la energía, la alta inflación y las interrupciones en la cadena de suministro, dijo el viernes el director ejecutivo de Commerzbank AG (CBK), Manfred Knof. La perspectiva actual del prestamista alemán para el año asume consecuencias económicas “limitadas” de la guerra de Ucrania, dijo.
El entorno en deterioro significa que los bancos europeos han querido resaltar su resiliencia, y UniCredit dijo el jueves que puede absorber los efectos macroeconómicos de la guerra en su negocio más amplio gracias a sus niveles de capital “fuertes”, la calidad de los activos y reservas prudentes para préstamos incobrables. El prestamista con sede en Milán, uno de los bancos europeos con mayor presencia en Rusia, tuvo una pérdida de $1.850 millones de euros (US$2.000 millones) relacionado con el país mientras evalúa su salida.
Hasta el momento, la mayoría de los prestamistas ven una crisis económica total desencadenada por la guerra como un riesgo remoto. Deutsche Bank AG (DB) dijo que considera que es un “caso negativo improbable” que los cuellos de botella de la cadena de suministro se traduzcan en pérdidas, mientras que el escenario central de Societe Generale es un “aterrizaje suave” de la economía europea, dijo el CEO Frederic Oudea en Bloomberg TV.
El mes pasado, el banco francés acordó vender su unidad Rosbank PJSC (ROSB) a la firma de inversiones de Vladimir Potanin, el hombre más rico de Rusia, teniendo una pérdida de unos $3.000 millones de euros (US$3.173 millones) para salir. Oudea dijo el jueves que se reflejaría en los resultados del segundo trimestre.
Varios bancos europeos, incluidos UniCredit y Commerzbank, utilizaron el primer trimestre para agregar una capa adicional de efectivo a sus provisiones de crédito, conocida como “superposición”, para amortiguar un deterioro potencial en el entorno económico en lugar de deterioros reales en la cartera de préstamos. Eso elevó la cantidad que los bancos reservan para préstamos incobrables al nivel más alto desde el inicio de la pandemia de Covid-19 en 2020.
Los bancos también están presionando a los clientes y profundizando en sus balances para ver cuáles pueden tener problemas para pagar los préstamos a medida que se amplían las consecuencias. Raiffeisen Bank International AG (RBI), un gran prestamista en Europa del Este y uno de los bancos extranjeros más grandes en Rusia junto con UniCredit, destacó $1.800 millones de euros (US$1.904 millones) de exposición a autopartes y equipos y $1.200 millones de euros (US$1.269 millones) relacionados con la industria química y de fertilizantes como los de mayor riesgo.
Mientras tanto, los bancos siguen divididos sobre si abandonar Rusia por completo. UniCredit y Raiffeisen de Austria todavía están sopesando sus opciones, y Raiffeisen dijo el miércoles que recibió interés de partes que buscan comprar su negocio ruso. Los prestamistas con puestos de avanzada más pequeños ya se están cerrando en el país.
-Con la asistencia de Caroline Connan, Alexandre Rajbhandari, Marton Eder y Sonia Sirletti.
Este artículo fue traducido por Miriam Salazar