Bloomberg — El petróleo subió debido a que los mercados de productos refinados se vieron favorecidos por la subida de los precios, contrarrestando las amenazas a las perspectivas de la demanda de combustible de China derivadas de sus estrictas medidas para frenar la Covid-19.
Los futuros del West Texas Intermediate cerraron por encima de los 105 dólares el barril, después de haber caído cerca de los 100 dólares al principio de la sesión. Los mercados de combustibles siguieron mostrando signos de extraordinaria estrechez, con los futuros del gasóleo subiendo casi un 5%. El rechazo a los productos petrolíferos rusos ha obligado a Europa y a América Latina a depender más de las importaciones estadounidenses de combustible, lo que ha provocado una gran escasez de suministros.
Los precios cayeron anteriormente debido a que China informó de una fuerte contracción de la actividad económica en abril, mientras el país trabaja para contener un brote generalizado de Covid-19, lo que aumenta la preocupación por una mayor interrupción de las cadenas de suministro mundiales.
Una medida de la prima del futuro del gasóleo con respecto a los futuros del crudo -el diferencial del crack del gasóleo- se disparó el lunes hasta alcanzar un nuevo máximo que se remonta a 1986. La fortaleza del gasóleo en relación con el crudo se debe al agotamiento de los suministros en todo el mundo a medida que los países reducen el consumo de combustible ruso.
“El desequilibrio de la demanda de gasóleo frente a la oferta en todo el mundo mantiene a los compradores activos ante cualquier debilidad del crudo”, dijo Dennis Kissler, Vicepresidente Senior de Trading de BOK Financial.
Aunque en las últimas sesiones los precios han bajado debido a la preocupación por una menor demanda, las señales a largo plazo apuntan a un mercado petrolero poco abastecido. Es probable que la alianza OPEP+ ratifique a finales de esta semana su plan de aumento de la oferta, a pesar de haber conseguido incrementar su producción sólo en un 10% en marzo. Mientras tanto, la Unión Europea va a proponer una prohibición de las importaciones rusas para finales de año, y Alemania ha declarado que podría poner fin a su dependencia de Rusia para el verano.
El petróleo subió por quinto mes en abril, marcando la racha de ganancias mensuales más larga desde enero de 2018. La invasión rusa de Ucrania ha espoleado la inflación, y llevó a Estados Unidos y sus aliados a acordar el mes pasado una liberación coordinada de las reservas estratégicas de crudo para aliviar los crecientes precios de la energía. La guerra también ha provocado un repunte de los precios del gasóleo en Estados Unidos.
Precios
El WTI para entrega en junio subió 48 centavos para establecerse en 105,17 dólares el barril en Nueva York.
El Brent para liquidación en julio subió 44 centavos para establecerse en 107,58 dólares el barril.
Pekín ha cerrado gimnasios y cines durante la festividad del Trabajo, que dura hasta el miércoles. Los cierres persisten en Shanghái, aunque hay cautelosos indicios de que el brote del centro financiero está empezando a remitir.
La demanda de petróleo en China ha disminuido en más de un millón de barriles diarios en lo que va de año y “no parece que vaya a remontar pronto”, dijo Ed Morse, jefe global de investigación de materias primas de Citigroup, en Bloomberg Television. Añadió que en Estados Unidos el consumo de gasolina se ha estancado.
