En este Día del Animal, numerosos usuarios de redes sociales suben a sus cuentas miles de fotografías de sus mascotas. Pero éstos, no son los únicos animales domésticos cuyas imágenes inundan la web, los perros cripto también son furor.
Este último es un fenómeno singular que nació como una broma, pero que llegó a mover miles de millones de dólares, gracias al impulso generado por Elon Musk.
Dogecoin, “la cripto de la gente”
Lo que surgió como un chiste llegó a ser una inversión más que rentable en algún momento, para quienes entraron y salieron a tiempo.
A fines de 2013, los ingenieros estadounidenses Billy Markus y Jackson Palmer diseñaron la criptomoneda Dogecoin (DOGE), que usa como imagen un perro Shiba Inu, que se hizo popular gracias a un meme que circulaba por la web en ese momento.
Esta criptodivisa nació como un juego en relación a la ya existente Bells, basada en el Animal Crossing de Nintendo, y tenía la esperanza de alcanzar una base de usuarios más amplia que la de los inversores que crearon el bitcoin (XBT).
Markus basó el Dogecoin en otra moneda que ya existía, el Litecoin (LTC), que también usa la tecnología scrypt en su algoritmo de prueba de trabajo, lo que significa que los mineros no pueden aprovecharse de equipamiento especializado para la minería de bitcoins para minar a mayor velocidad.
Pese a su origen lúdico, Dogecoin llegó a alcanzar una enorme popularidad en distintos períodos. El caso más resonante se dio cuando Elon Musk se refirió a Doge en Twitter y generó un enorme alza en el precio del activo.
El 20 de diciembre de 2020, el CEO de Tesla Inc (TSLA) y flamante propietario de Twitter Inc. (TWTR) posteó: “Una palabra: Doge”.
Este tuit estimuló a centenares de personas a abalanzarse sobre la divisa y su valor creció un 50%. Asimismo, cuando el magnate sudafricano escribió, en febrero de 2021, que Doge era “la moneda del pueblo”, comenzó un nuevo rally fenomenal, al punto de que para los primeros días de mayo de ese año la moneda estaba un 11.000% arriba respecto de diciembre de 2020.
Esto generó preocupación en el mundo cripto, ya que el valor de la moneda estaba creciendo sin mayores fundamentos y llegó a tocar máximos de casi US$0.60 centavos. Luego se comenzó a desinflar, al punto que hoy tiene un precio de US$0,1394. Sin embargo, la compra de Twitter por parte de Elon Musk le dio un nuevo impulso en los últimos días.
Shiba Inu
Doge generó una nueva competencia en 2020, basada en el mismo animal. El token Shiba Inu (SHIB), una criptomoneda descentralizada creada en agosto de ese año por una persona o grupo anónimo conocido como “Ryoshi”, fue todo un desafío.
Al igual que Doge, lleva como imagen al perro de raza japonesa originaria de la región de Chūbu. Shiba Inu se ha caracterizado como una moneda meme, pero también ha habido preocupaciones sobre la concentración en una sola billetera “ballena” que controla miles de millones de dólares en el token y genera compras frenéticas por parte de inversores minoristas, debido al miedo de estos últimos a perderse una ganancia extraordinaria.
El 13 de mayo, el creador de la criptomoneda Ether, Vitalik Buterin donó más de 50 billones de SHIB (con un valor de más de US$1.000 en es en ese momento) al fondo de ayuda para criptomonedas de la India por el COVID.
El precio de la criptomoneda aumentó notablemente a principios de octubre de 2021: saltó un 240% durante en una semana. Sin embargo, a principios de noviembre el precio bajó y siguió bajando, finalizando el mes habiendo perdido aproximadamente el 55% de su valor.
El valor actual de Shib se ubica en US$0,00002279, pero llegó a cotizar US$0,00008.
Dogelon Mars
La tercera moneda basada en perros con mayor capitalización de mercado es la Dogelon Mars (ELON). Es uno de los muchos tokens criptográficos con temática perruna que se lanzaron en 2021 y es un homenaje en broma a Elon Musk.
El equipo detrás de la cripto lo describe como una moneda universal justa para las personas y lo ha promocionado como “una moneda interplanetaria utilizada por los colonizadores espaciales”.
Además de ser una criptomoneda, Dogelon Mars también es un personaje que protagoniza una serie de cómics a la venta como tokens no fungibles (NFT).
El medio especializado Coin Telegraph consignó que hay muchos más tokens que se han lanzado en varias redes de blockchain. Por ejemplo, el token Australian Safe Shephard (ASS), que es la dogcoin (moneda perro) basado en Binance Smart Chain (BSC), y Samoyedcoin (SAMO), una dogcoin de la red de Solana, entre otras decenas de alternativas.
Si bien el primer perro moneda nació en 2013, el boom se dio recién en 2021.