Bogotá — El mercado castigó las acciones de Netflix desde el momento en que se conoció que por primera vez en 10 años redujo su número de suscriptores.
En la primera jornada tras la noticia de las 200 mil cuentas que dejaron de estar activas las acciones de la compañía se contrajeron en un 35%.
Posteriormente, en la conferencia de resultados se supo que la compañía proyecta que perderá 2 millones más de usuarios en el actual segundo trimestre, lo que contrasta con los crecimientos anuales que se le conocieron en los que incorporaba 25 millones de usuarios cada año.
Ante ello surgió la duda de si el desplome que experimentaron las acciones de la compañía se podía considerar como “el inicio del fin” de la empresa o si era una reacción exagerada del mercado y que en un corto a mediano plazo se debería ver un rebote de sus títulos.
Sebastián Toro, cofundador de Arena Alfa, asegura que a su juicio la acción, tras conocerse los resultados, esta subvalorada, aunque aclara que esa es su lectura y que esta no debe entenderse como una recomendación para que terceros inviertan en la compañía.
“Por muchos años existió una burbuja en la acción de Netflix. La gente pagaba precios muy altos por esa empresa por el crecimiento y las expectativas. Por primera vez perdió suscriptores y se proyecta que los siga perdiendo”, dice Toro, quien, además, explica que eso se debe a “competencia, inflación y ciclo económico que estamos viviendo, pero también tiene que ver mucho el tema de Rusia porque nada más allá perdieron 700 mil suscriptores”.
Dicho ajuste que se dio en los suscriptores fue lo que motivó el castigo del mercado a sus acciones, y es ese mismo escenario que le hace pensar a Toro que hoy es una compañía que está “barata”.
“Para mí el desinfle de Netflix, que alguna vez fue una compañía de US$300 mil millones, con esta caída a US$190 la acción es una compañía de US$84 mil millones, es decir, está muy barata, está cotizando casi que, en los múltiplos más baratos de su historia, no se veía así de subvalorada prácticamente desde el 2013″, considera el cofundador de Arena Alfa.
No obstante, si bien la acción cayó por la expectativa de perder nuevos suscriptores hay otros factores que podrían quitarle aún más brillo a la compañía.
Para Gregorio Gandini, analista de mercados financieros, “fue una caída muy fuerte originada por la sorpresa en la expectativa de perder 2 millones de suscriptores, sin embargo, hay dos elementos importantes por los que creo que va a perder atractivo: 1. Se está reduciendo el ritmo del streaming mundial, y 2. Una posible saturación del mercado ante la entrada de cada vez más jugadores”.
En ese mismo sentido Gandini advierte que “en el caso específico de optar por invertir en Netflix es importante tener en cuenta cómo va a poder reforzar su propuesta de programación para atraer nuevos usuarios”.
Pese a ello, Toro asegura que “Netflix en estos niveles de US$190 o US$200 hay muy buenas oportunidad que cada inversionista según su perfil de riesgo deberá analizar y decidir si le interesa o no entrar, pero de hacerlo estaría comprando en niveles de 2013, es una empresa que está cotizando a 17 o 18 años de utilidades y es una compañía que históricamente el mercado valoraba a más de 100 años de utilidades, eso era una burbuja, pero 17 años para una compañía con tanto potencial de crecimiento realmente es una gran oportunidad, pero obviamente, tiene muchos riegos”.
Incluso, Toro asegura que el mercado esta siendo fatalista con la empresa, y recuerda que en la conferencia de resultados se habló de la posibilidad de monetizar los casi 100 millones de cuentas que hoy se comparten.
“La compañía tiene 220 millones de suscriptores y hay 100 millones usándolo gratis, si logran monetizar al menos un 10% de eso es un dinero importante, además, se habló de la posibilidad de ofrecer publicidad que puede ser un driver de ingresos interesante, eso podría jalonar los ingresos. De otro lado están las recientes compras de compañías de videojuegos que, cree uno, podrían estar apuntando a abrir un nuevo nicho de negocio, hay catalizadores interesantes y por eso creo que hay un pesimismo extremo y que en cualquier momento habrá un rebote fuerte y en mi opinión está subvalorada que abre una posibilidad interesante que la gente puede estudiar”, concluyó.