Ciudad de Panamá. — La transición del transporte de combustión interna a eléctrico comenzó en Panamá, al ser sancionada la ley que regula el desarrollo y operación de la movilidad eléctrica.
La legislación establece que a partir del 2025 un 10% de los vehículos de entidades públicas y del transporte colectivo y selectivo serán eléctricos, porcentaje que en 2027 pasará a un 25% y en 2030 a un 40%.
En 2021 en Panamá se comercializaron 65 autos eléctricos, informó Eduardo López de Victoria, gerente general de BYD Panamá, quien agregó que muchas empresas de automóviles han vendido toda su flota, esperando que si la oferta está disponible habrá una mayor venta.
Esto, añadió, se dará porque las personas conocen más del tema y porque el hecho de que la ley esté aprobada propiciará que se traigan más marcas al mercado.
Indicó que ya el mercado financiero está ofreciendo diferentes alternativas para la adquisición de carros eléctricos, citando como ejemplo la Caja de Ahorros, que está ofreciendo una tasa de 4.5%, mientras que otros están haciendo promociones para la venta de estos vehículos.
Los precios de estos vehículos en el país oscilan entre $25 mil hasta $70 mil, lo que permite acceder a varios segmentos del mercado, y mientras haya más competencia habrá más opciones.
En el parque vehicular panameño hay registrados en estos momentos unos 300 autos eléctricos.
En América Latina y el Caribe, de acuerdo con el Banco de Desarrollo Agropecuario (BID), el principal desafío para la adopción de la electromovilidad, al estar sujeta exclusivamente a la importación de la tecnología de vehículos eléctricos, es que los precios de producción bajen lo suficiente para que los mismos se vuelvan competitivos frente a los vehículos de combustión interna.
Mientras que no se alcance un punto de quiebre en las principales economías desarrolladas, este efecto no habrá de trasladarse a economías importadoras de tecnología, apunta el organismo internacional.
Otro escenario sería que los vehículos se empiecen a producir dentro de la región para reducir o eliminar ciertos costos, y esta posibilidad podría ocurrir en el corto plazo, sobre todo con algunos modelos.
Al referirse al mantenimiento de los vehículos eléctricos, López de Victoria explicó que su combustión es mucho más económica, se puede llegar hasta el 60% de ahorro, tiene menos partes mecánicas y por ende el mantenimiento es bajo, además de que la emisión de ruido y de gases invernaderos es mínima, lo que permite tener un país más limpio.
Un informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático señala que para el 2030 el calentamiento global alcanzará los 1.5°C, lo que no permitirá cumplir con el Acuerdo de París.
El transporte en América Latina y el Caribe representa más del 20% de las emisiones de CO2 totales, lo que convierte a este sector en un elemento clave dentro de los compromisos de la región para combatir el cambio climático.
La legislación aprobada en Panamá establece que en el caso del transporte masivo, certificados de transporte público colectivo y selectivo, se tendrá un mínimo de 10% de la flota de autos que deben ser eléctricos en el 2025; en tanto que al 2027 aumentará el porcentaje al 20% y en el 2030 a un 33%.
Según la disposición firmada por el presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen, la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre hará la revisión anual para que los operadores del transporte cumplan con el reemplazo de los vehículos de combustión interna a eléctricos.
La pena por incumplir con este dictamen provocará la cancelación del certificado de operación.