Kim Jong Un parece reducir su umbral para justificar un ataque nuclear

Kim dio señales de una política más flexible respecto a su posible uso de armas atómicas en un desfile militar en Pyongyang emitido por la televisión estatal a última hora del martes

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Bloomberg — El líder norcoreano Kim Jong Un parece haber reducido su umbral para un ataque nuclear, aumentando los riesgos de un error de cálculo mientras despliega nuevas armas cuyos usos van desde ataques tácticos cercanos hasta la amenaza a EE.UU.

Kim dio señales de una política más laxa respecto a su posible uso de armas atómicas en un desfile militar en Pyongyang emitido por la televisión estatal a última hora del martes. Aunque la fuerza nuclear de Corea del Norte estaba destinada principalmente a “disuadir las guerras”, tenía una “segunda misión” y “no puede limitarse a una sola misión, si se produce una situación no deseada en esta tierra”, dijo el lunes por la noche a decenas de miles de ciudadanos.

El líder norcoreano ha respaldado sus palabras con pruebas de armas diseñadas para eludir las defensas antimisiles estadounidenses en Asia y lanzar ojivas al territorio continental de Estados Unidos. Las imágenes satelitales indican que Corea del Norte está preparando un sitio clave para la primera prueba nuclear del país desde 2017, después de prometer que desarrollará nuevas ojivas miniaturizadas para armas tácticas y bombas más potentes que serían transportadas por cohetes de largo alcance.

El desfile indica que la “doctrina nuclear de Kim se está expandiendo y volviéndose más agresiva”, dijo Cha Du-hyeogn, que sirvió como asesor de seguridad del ex presidente conservador de Corea del Sur, Lee Myung-bak. Las acciones del líder norcoreano indicaban que su política había “alcanzado una fase diferente”, en la que podía tratar de aprovechar la amenaza de ataques atómicos para lograr objetivos diplomáticos, dijo Cha, que ahora es investigador visitante en el Instituto Asan.

“No es la primera vez que Kim Jong Un insinúa la opción de primer uso de Corea del Norte, pero normalmente enfatiza que usará las armas como herramienta de disuasión”, dijo Cha.

El cambio eleva el riesgo de un error de cálculo nuclear en la región de Asia-Pacífico, incluso cuando Rusia hace surgir repetidamente el espectro de una confrontación similar relacionada a Ucrania en Europa. Hasta ahora, Kim ha rechazado las propuestas del presidente estadounidense, Joe Biden, para reanudar las conversaciones nucleares, que fracasaron después de que su predecesor, Donald Trump, rechazara las demandas de Kim de un amplio alivio de las sanciones internacionales a cambio de cerrar un complejo nuclear clave.

Kim no ha dejado de aumentar las tensiones con Estados Unidos y Corea del Sur desde que se rompieron las conversaciones en 2019, incluyendo una serie de pruebas de misiles balísticos prohibidas por las resoluciones de Naciones Unidas. El mes pasado, Corea del Norte disparó su primer misil balístico intercontinental (ICBM por sus siglas en inglés) en más de cuatro años, luego de desplegar varias armas nuevas, como vehículos hipersónicos de planeo diseñados para utilizar altas velocidades y maniobrabilidad para evadir los interceptores.

En el desfile de esta semana se presentó el creciente conjunto de sistemas con capacidad nuclear, incluidas las nuevas armas tácticas que podrían alcanzar muchas bases estadounidenses en Corea del Sur en tres minutos o menos. El evento contó con ocho ICBM, entre ellos cuatro Hwasong-17, que se cree que están destinados a transportar múltiples ojivas a través del Pacífico.

“El discurso de Kim mostró su continua amenaza de utilizar armas nucleares en los primeros momentos de un conflicto”, dijo Melissa Hanham, experta en no proliferación y afiliada al Centro de Seguridad y Cooperación Internacional de Stanford. “Este tipo de pensamiento crea una dinámica inestable propensa a accidentes o malentendidos”.

Bloomberg Quicktake (@Quicktake): Corea del Norte mostró su mayor misil balístico intercontinental, el Hwasong-17, mientras Kim Jong Un se comprometía a reforzar el arsenal atómico de su país

La congelación de las relaciones diplomáticas con Estados Unidos ha dado a Kim pocos incentivos para abstenerse de realizar pruebas armamentísticas, y las crecientes tensiones entre Washington y Pekín y Moscú sobre Ucrania disminuyen la amenaza de nuevas sanciones por parte del Consejo de Seguridad de la ONU. Apenas se ha hablado de nuevas sanciones por el ensayo de un misil balístico intercontinental realizado por Corea del Norte en marzo.

La próxima gran provocación de Kim podría ser la prueba de una bomba nuclear. Corea del Norte es el único país conocido que ha hecho esto desde principios de este siglo. Aunque la última prueba fue una potente bomba atómica con una potencia estimada de entre 120 y 250 kilotones, los analistas afirman que podría intentar demostrar su capacidad de producir ojivas más pequeñas con usos tácticos, y más ambiguos.

Las tensiones aumentarán en la península cuando el presidente electo de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, tome posesión de su cargo el 10 de mayo con la promesa de mantener una línea dura con Pyongyang. También se espera que Biden visite Corea del Sur y Japón a finales de mayo para demostrar que el conflicto de Ucrania no ha distraído a la administración estadounidense de Asia.

Kim aludió el lunes a la creciente agitación geopolítica mientras trataba de justificar la necesidad de acelerar su acumulación nuclear.

“Para prepararnos para la turbulenta situación política y militar y para todo tipo de crisis en el futuro, avanzaremos con mayor rapidez y firmeza en el camino de la autodefensa y la construcción de fuerzas modernas”, dijo en su discurso.

Este artículo fue traducido por Andrea González