Bloomberg — El canciller alemán, Olaf Scholz, prometió continuar enviando armamento a Ucrania, aunque insistió en que su objetivo era evitar un conflicto abierto con Rusia que podría conducir a una guerra nuclear.
Scholz se ha visto sometido a una intensa presión para aumentar el apoyo militar a Ucrania, incluido el envío de armas pesadas como tanques y ampliar las sanciones de la Unión Europea contra Rusia para incluir las importaciones de petróleo y gas natural.
“Necesitamos hacer todo lo posible para evitar una confrontación militar directa entre la OTAN y una superpotencia fuertemente armada como Rusia, una potencia nuclear”, dijo Scholz a la revista Der Spiegel en una entrevista publicada el viernes. “Haré todo lo posible para evitar una escalada que pueda conducir a la Tercera Guerra Mundial, no puede haber una guerra nuclear”.
Scholz reforzó su rechazo a un embargo de gas inmediato de la UE y dijo que tal medida no terminaría con la guerra en Ucrania y, en cambio, desencadenaría una “crisis económica dramática” en Europa, lo que provocaría la pérdida de millones de empleos.
Los economistas están en desacuerdo sobre la gravedad del impacto. El Bundesbank estima que la economía alemana corre el riesgo de contraerse casi un 2% este año si un embargo sobre el carbón, petróleo y el gas ruso conduce a restricciones por parte de los proveedores de energía y la industria.
Un pronóstico conjunto de los principales institutos económicos del país proyectó el daño total de una pérdida repentina en los suministros de energía rusos en 220.000 millones de euros (US$240.000 millones), o alrededor del 6,5% de la producción nacional.
Los riesgos de que la escalada de ataques de Rusia contra Ucrania desencadenen sanciones y contrasanciones agravadas son altos. Una prohibición total de la energía tendría el mayor impacto.
Scholz rechazó la afirmación de que Alemania estaba haciendo muy poco para apoyar a Ucrania en su defensa contra Rusia. Agregó que Alemania estaba en conversaciones con el Gobierno esloveno sobre un acuerdo en el que la nación balcánica enviaría equipo militar de la era soviética, como tanques, a Ucrania a cambio de hardware (equipo) más moderno de la industria alemana.
“Estamos suministrando armas y muchos de nuestros aliados están haciendo lo mismo. No se trata de miedo, sino de responsabilidad política”, dijo Scholz. “Evitar una escalada que involucre a la OTAN es la máxima prioridad para mí. Así que no miro las urnas ni me dejo irritar por llamadas estridentes”.
El canciller hizo un llamado al presidente Vladímir Putin a detener los ataques y retirar las tropas rusas del territorio ocupado en Ucrania.
“Debe haber un acuerdo de paz que permita a Ucrania defenderse en el futuro”, dijo. “Dotarlos de tal manera que su seguridad esté garantizada, y estamos disponibles para garantizar eso. No habrá una paz dictada como la que Putin había soñado durante mucho tiempo”.
Insistió en que las sanciones permanecerán vigentes al menos hasta que haya un acuerdo entre Rusia y Ucrania. “Una paz fría que no esté sellada con un acuerdo no liberará a Rusia del régimen de sanciones”, dijo.
Salida total
En declaraciones a periodistas en Vilna, la ministra de Relaciones Exteriores, Annalena Baerbock, dijo que Alemania y sus aliados de la UE estaban trabajando juntos en una prohibición gradual de importación de petróleo ruso, pero esto no sucederá de la noche a la mañana.
Rechazó la afirmación de que Alemania estaba jugando un rol clave en retrasar las medidas dirigidas a la energía rusa y dijo que casi todos los demás estados miembros de la UE también se oponían a una prohibición inmediata de importación de petróleo y gas natural debido a las preocupaciones sobre el impacto en los consumidores.
La prohibición de importación de carbón ruso del bloque, que está siendo implementada de manera gradual durante cuatro meses, fue un primer paso en el plan de la UE para una salida completa e irreversible de la energía rusa, dijo Baerbock.
“Es por eso que tenemos un plan para eliminar gradualmente el petróleo a más tardar a fin de año, junto con todos los países europeos”, dijo. “Si damos este paso ahora para independizarnos de las importaciones de combustibles fósiles rusos, entonces este paso debe ser para siempre”.