Bloomberg — Hong Kong abrirá sus puertas a los no residentes a partir del mes que viene, una señal de que el centro financiero está tomando algunas medidas para suavizar las normas de viaje más estrictas del mundo en relación con la pandemia.
Según las nuevas normas, los viajeros se tendrán que hacer una prueba rápida de Covid-19 en el aeropuerto, y los que den negativo podrán dirigirse a un hotel de cuarentena designado durante siete días.
Hong Kong también está suavizando las normas para detener rutas de vuelo, diciendo que la suspensión entrará en vigor si cinco pasajeros dan positivo a la llegada, frente a los tres de la regla anterior. El gobierno dijo que era consciente de las opiniones de que el antiguo enfoque había sido “demasiado duro, llevando a la suspensión de diferentes rutas y perturbando fácilmente los itinerarios de las personas que volvían a Hong Kong”.
Las aerolíneas y los viajeros se han sentido frustrados por las normas de suspensión de vuelos, que podían llevar a la paralización de cualquier ruta. Actualmente hay más de 10 rutas suspendidas, entre ellas las de Cathay Pacific Airways Ltd. (0293), Emirates (ENBD) y Qatar Airways. Algunas compañías, como British Airways Plc (IAG) y Virgin Atlantic Airways Ltd., no aceptan reservas de vuelos a la antigua colonia británica hasta finales de año.
La prohibición a los no residentes está en vigor desde marzo de 2020, aunque se levantó brevemente para los viajeros de ciertos lugares. Las decisiones sobre una mayor flexibilización se dejarán probablemente en manos del sucesor de la jefa ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, John Lee, cuando asuma el cargo en julio tras unas elecciones sin oposición, dijo a Bloomberg News una persona familiarizada con el plan.
Las estrictas normas de viaje de Hong Kong contrastan con las de otros lugares del mundo, que han decidido convivir con el Covid-19. Entre ellos se encuentra Singapur, que el viernes eliminó todas las pruebas para los visitantes vacunados que lleguen y los límites en el tamaño de las reuniones.
Otras medidas adoptadas en Singapur, que entraron en vigor el martes, son permitir que todos los trabajadores vuelvan al lugar de trabajo y suprimir la comprobación del estado de vacunación de las personas en la mayoría de los lugares, según un comunicado del Ministerio de Sanidad.
Con la asistencia de Manuel Baigorri.
Este artículo fue traducido por Andrea González