Estas son las claves para que las startups sobrevivan al ‘valle de la muerte’

En entrevista con Bloomberg Línea, Denis Yris, director general de la aceleradora y fondo de capital WORTEV, afirma que adentrarse a la operación de las startups las salva de la quiebra.

Por

Ciudad de México – Denis Yris, director general de la aceleradora y fondo de capital WORTEV, ha vivido en carne propia lo que es pasar por el valle de la muerte con uno de sus emprendimientos. Hace 10 años emprendió, por primera vez, en un proyecto de inteligencia artificial. Conseguir capital fue su principal obstáculo.

“Me acercaba los fondos y todos nos pedían más y más resultados”, recuerda Yris. Y el capital necesario nunca llegó para sobrevivir al valle de la muerte, un concepto que se acuñó en las escuelas de negocios para describir el momento en que los emprendedores se quedan sin recursos de financiación para continuar con su negocio.

Sin dinero ni para sus gastos básicos, Yris decidió pivotar el modelo de negocio por sugerencia de su socia Isabel Guízar. Fue entonces cuando cambiaron de una startup de inteligencia artificial a una de inteligencia de negocios para pequeñas y medianas empresas (pymes) que les ofreciera datos para mejorar la toma de decisiones y así evitar que se fueran a la quiebra.

Eso evolucionó a una aceleradora de negocios, que no sólo se queda en dar una consultoría a los emprendedores sino que va más allá, a revisar el núcleo operativo con un equipo especializado y multidisciplinario para ayudar al emprendedor y que él se enfoque en el desarrollo y comercialización de su producto o servicio, comparte Yris en entrevista con Bloomberg Línea.

Y es que, los principales motivos de que una startup no sobreviva al valle de la muerte son financieros, pero también están asociados a aspectos comerciales y operativos que no se corrigieron a tiempo.

¿Cómo superar el valle de la muerte en un emprendimiento?

La principal solución para superar este momento en la etapa inicial de una startup es levantar capital de ángeles inversionistas y fondos de capital. “Cuando tú recibes una inversión de capital emprendedor estás reduciendo por mucho tu tasa de riesgo”, acota Yris.

Las cifras indican que en México sólo el 35% de los emprendimientos sobreviven los primeros 5 años, pero los que tienen capital de fondos tienen una tasa de sobrevivencia de más del 80%, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Capital Privado (AMEXCAP).

Las cifras son alarmantes, dice Yris. Por eso, el emprendedor e inversionista creó el concepto de aceleradora nuclear, en el que WORTEV se involucra en el núcleo de la empresa para ayudarlos a crecer y no sólo eso, también les da capital semilla.

Además de la aceleradora de negocios, en 2018, Yris abrió un fondo de capital emprendedor al inversionista individual, a diferencia de otros fondos que solamente están abiertos a inversionistas institucionales, con el objetivo de empezar a apoyar a las empresas emergentes que no entran en las tesis de inversión de otros fondos de venture capital.

“Nuestra tesis de inversión va a proyectos de innovación tecnológica, pero también vamos a proyectos tradicionales como consumo, agronegocios, turismo y proyectos de impacto social porque el ecosistema emprendedor está apenas madurando y no podemos dejar de lado los proyectos tradicionales”, detalla Yris.

De hecho, el 80% de su portafolio está conformado por proyectos tradicionales, pero que tienen una innovación dentro de su modelo. Por ejemplo, IMITI, un proyecto de salones de eventos que se enfocaron en un nicho de mercado, ellos hacen eventos tipo night club y en su modelo de negocio incluye el financiamiento de los eventos, eso ayudó a que durante la pandemia tuvieran ingresos recurrentes.

Gracias a la aceleradora nuclear de negocios que han construido, WORTEV ha identificado y entendido cuáles son los principales puntos de fracaso de las startups. Yris comparte tres aspectos clave a tomar en cuenta para sobrevivir al temido valle de la muerte de las startups en etapa temprana.

1. La planeación

“En muchas ocasiones el emprendedor empieza a vender, pero no visualiza, no planea, no entiende la industria ni a la competencia y realmente eso se empieza a convertir en un problema”, explica Yris.

Contar con un plan financiero y operativo permitirá darle rumbo a la empresa y crecer de manera ordenada.

2. La contratación de capital humano

Es importante formar un equipo que complemente la experiencia y habilidades del fundador de la startup. Una empresa naciente con un equipo experimentado que lo respalde es atractiva para los inversionistas. “En WORTEV invertimos en equipos, no en una sola persona”, dice Yris.

El mercado laboral es competitivo, sobre todo en las posiciones que tienen que ver con tecnología. Pero, “cuando uno está emprendiendo y no tiene capitalización, entonces ofreces sueldos no tan altos, pero ofreces capacitación. El problema es que el colaborador que capacitaste acaba yéndose a otra empresa”, comenta. La falta de compromiso de los colaboradores también es un problema, señala el inversionista.

3. La tracción del mercado

A veces uno de los grandes problemas es la mala tracción del mercado. Al no tener un enfoque directo sobre cómo es el cliente potencial, los emprendedores desperdician parte del presupuesto destinado a atraer este mercado.

Yris explica que muchas veces el emprendedor pierde tiempo en todo lo que está haciendo y no se enfoca en lo más importante que es vender. Y sentencia: “El emprendedor que no sabe vender, no sabe emprender”.

Estos problemas operativos aunados a la falta de capital llevan a las startups a quedarse en el valle de la muerte. Por eso es importante contar con inversionistas que estén dispuestos a invertir smart money, es decir, dinero acompañado de conocimiento y experiencia del inversor que pueda ayudar a crecer a las startups y llevarlas a la siguiente etapa.

Eso es lo que busca WORTEV. “Lo que nosotros queremos hacer es llevar los proyectos con el venture capital y que no les pase lo que a nosotros nos pasó de no tener resultados”, afirma Yris, quien exhorta a los inversionistas a cambiar la cultura del miedo al riesgo y al inversionista individual a apoyar al emprendedor.

La meta de WORTEV para el 2022 es cerrar con la aceleración e inversión de 100 proyectos en etapas tempranas.