Bloomberg — Arcos Dorados Holdings Inc, el mayor operador mundial de restaurantes McDonald’s, tiene previsto vender por primera vez bonos vinculados a sus objetivos de sostenibilidad. Los bonos senior no garantizados estarán vinculados a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en un 36% en los restaurantes y oficinas y en un 31% en la cadena de suministro para 2030, según un comunicado del lunes. Los bonos serán emitidos por la filial de Arcos Dorados B.V., dijo la empresa con sede en Buenos Aires.
Moody’s Investors Service asignó una calificación Ba2 a los bonos de siete a diez años. Los ingresos se destinarán a financiar una oferta de compra en efectivo de unos US$351 millones de bonos de Arcos Dorados al 6,625% con vencimiento en 2023 y de sus bonos al 5,875% con vencimiento en 2027, así como a fines corporativos generales.
Arcos Dorados anunció la recompra de deuda por separado el lunes. La compañía no dijo cuánto planea recaudar en la nueva oferta de deuda.
Los bonos ligados a la sostenibilidad, o SLBs, son cada vez más populares porque pueden ser utilizados por un grupo más amplio de prestatarios, incluidos los que no tienen grandes proyectos ambientales, lo que les permite aprovechar una creciente industria de fondos éticos y obtener costos de endeudamiento más baratos. Las ventas mundiales ascendieron a un récord de 110.000 millones de dólares en 2021, según datos recopilados por Bloomberg. Barclays Plc espera que las ventas de SLB alcancen los 235.000 millones de dólares a finales de año.
Los SLB pueden utilizarse para fines corporativos generales, siempre que los emisores se comprometan a cumplir ciertos umbrales sociales o medioambientales, como la reducción de las emisiones de carbono en toda la empresa.
Arcos Dorados, que se describe a sí misma como la mayor franquicia independiente de McDonald’s, está centrada en la búsqueda de formas de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, incluyendo planes para reemplazar su flota de vehículos con vehículos híbridos o eléctricos y la creación de programas más estrictos para sus distribuidores, según su marco de financiación vinculado a la sostenibilidad publicado este mes.
El franquiciado tiene una puntuación de impacto crediticio ESG moderadamente negativa de Moody’s, lo que refleja la evaluación de la calificadora de crédito de que se considera que los atributos ESG tienen un impacto limitado en la calificación actual, “con un mayor potencial de impacto negativo futuro”, dijo Moody’s en un comunicado el lunes.