Inversores mundiales huyen de China por temor a que riesgos eclipsen beneficios

La cuestión central es lo que podría ocurrir en un país dispuesto a hacer todo lo posible para lograr los objetivos de su líder

Los mercados esperan los resultados económicos de China para evaluar el impacto que ha tenido el Covid-19
Por Sofia Horta e Costa y Tania Chen
18 de abril, 2022 | 06:12 PM
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Bloomberg — Una creciente lista de riesgos está convirtiendo a China en un posible atolladero para los inversores mundiales.

La cuestión central es lo que podría ocurrir en un país dispuesto a hacer todo lo posible para lograr los objetivos de su líder. La amistad del presidente Xi Jinping con su homólogo ruso Vladimir Putin ha hecho que los inversores desconfíen más de China, mientras que la narrativa del hombre fuerte está ganando impulso a medida que el Partido Comunista persigue tenazmente una estrategia de Covid-19 Cero y campañas impredecibles para regular industrias enteras.

En consecuencia, algunos inversores internacionales consideran que una asignación agresiva de recursos a China es cada vez más problemática. La salida de flujos del mercado de acciones y de bonos y de fondos de inversión del país se aceleraron tras la invasión rusa de Ucrania, mientras que el fondo soberano de Noruega, de US$1,3 billones, ha rechazado a un gigante chino de la ropa deportiva por su preocupación por los abusos de derechos humanos. Los fondos de capital privado en dólares estadounidenses que invierten en China recaudaron apenas US$1.400 millones en el primer trimestre, la cifra más baja desde 2018 para el mismo periodo. El lunes, datos económicos de China, mejores de lo esperado, provocaron preguntas de los analistas que señalaron inconsistencias con estadísticas alternativas que pintan una imagen más sombría de la economía.

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La escala y la velocidad de las sanciones impuestas a Rusia obligaron a replantear las actitudes occidentales hacia China, según Simon Edelsten, de la firma de inversión británica Artemis Investment Management LLP. Su equipo en la gestora de US$37.000 millones vendió todas sus inversiones en China el año pasado, tras las intervenciones de Pekín en las salidas a bolsa de alto perfil, como Didi Global Inc. (DIDI) y Ant Group Co. (6688), alegando que tales movimientos amenazaban los derechos de los accionistas. La retórica más asertiva de China en torno a Hong Kong y las reclamaciones de soberanía en el Mar de China Meridional también inquietaron al equipo de inversión, dijo Edelsten.

“La política y los factores de gobernanza deberían marcar ahora un tono de cautela, especialmente para los compromisos a largo plazo” con China, dijo Edelsten, añadiendo que las medidas europeas adoptadas contra Rusia demuestran que los fuertes lazos comerciales no son garantía de seguridad diplomática.

“La invasión de Ucrania eleva mucho estos riesgos y es probable que nuestros fondos sigan teniendo una ponderación muy baja en China durante algunos años”, añadió.

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Rendimientos decrecientes
El índice de referencia de las acciones de China está cerca de su nivel más bajo desde 2014 frente al mundo
Blanco: nivel del índice CSI 300 frente al índice mundial MSCI A;;-Country

Brendan Ahern, director de inversiones de Krane Funds Advisors LLC, describe la “venta indiscriminada e insensible al precio” de las acciones chinas por parte de los inversores internacionales en el último año.

Las medidas regulatorias de Pekín “se sintieron como un ataque a las empresas más respetadas y con mayor presencia en el extranjero”, dijo, mientras que las sanciones a Rusia suscitaron la preocupación de que pudiera ocurrir lo mismo con China. Su empresa, que gestiona fondos cotizados centrados en China, está sustituyendo las acciones chinas que cotizan en Estados Unidos por las que se negocian en Hong Kong para reducir el riesgo.

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Ganar dinero en los mercados de China se ha vuelto más difícil. El índice CSI 300 ha perdido un 15% en lo que va de año y su rentabilidad ajustada por el riesgo, medida por el ratio del índice de Sharpe, es una de las más bajas del mundo, con menos 2,1. Esta cifra es sólo ligeramente mejor que la del índice Colombo All-Share de Sri Lanka. El índice chino está cotizando cerca del nivel más bajo desde 2014 en relación con el indicador bursátil global de MSCI Inc.

Por primera vez desde 2010, los pagarés soberanos chinos de referencia a 10 años no ofrecen ningún traslado sobre los bonos del Tesoro estadounidenses comparables. Y los rendimientos en el mercado de crédito de alto rendimiento en dólares de China fueron los peores en al menos una década el pasado trimestre.

Los fondos mundiales han empezado a retirarse, vendiendo en marzo más de US$7.000 millones en acciones cotizadas en el continente a través de los enlaces bursátiles con Hong Kong. También se deshicieron de US$14.000 millones en deuda pública china en los últimos dos meses y recortaron sus tenencias de crédito. Apostar contra China se consideró la quinta operación más concurrida en la encuesta más reciente de Bank of America Corp. (BAC) entre los inversores.

“Los mercados están preocupados por los lazos de China con Rusia: está asustando a los inversores y se puede ver esa aversión al riesgo desde el comienzo de la invasión”, dijo Stephen Innes, socio gerente de SPI Asset Management. “Todo el mundo estaba vendiendo bonos de China, así que nos alegramos de no haber comprado ninguno”.

Prima que desaparece 
Los rendimientos de los bonos chinos cotizan por debajo de los del Tesoro por primera vez en más de una década
Blanco: Diferencia entre los rendimientos de los bonos del Estado a 10 años de Estados Unidos y China

Aun así, desprenderse de China puede no ser una opción sencilla. La segunda economía más grande del mundo posee un mercado de bonos de US$21 billones y bolsas de valores valuadas en US$16,4 billones incluyendo a Hong Kong. Sus activos ofrecen diversificación a los inversores, dijo la semana pasada el jefe de inversiones de Amundi Singapore Ltd., Joevin Teo, mientras que las estrategias de activos múltiples se enfrentan a la amenaza de la inflación y al endurecimiento de las condiciones financieras mundiales. Algunos incluso han calificado los activos chinos como refugio.

“Es una de las mejores historias de diversificación para los fondos globales debido a su naturaleza idiosincrática”, dijo Lin Jing Leong, analista senior de mercados emergentes de Asia soberana en Columbia Threadneedle Investments, que gestiona unos US$754.000 millones. “Quién es el propietario del mercado, el ciclo de crecimiento de China y las presiones inflacionistas, la baja volatilidad de su cesta de divisas” contribuyen a proporcionar una mejor rentabilidad ajustada al riesgo, añadió.

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Las autoridades chinas parecen estar tomando medidas para atraer a los fondos mundiales. El mes pasado, los reguladores prometieron garantizar que las políticas sean más transparentes y predecibles, puntos clave para los inversores que perdieron billones de dólares en 2021 debido a la ofensiva de Pekín contra las empresas tecnológicas y de tutoría. China también está haciendo compromisos que podrían conceder a los reguladores estadounidenses un acceso parcial a las auditorías de las empresas chinas que cotizan en EE.UU.

Mientras que gigantes de Wall Street como JPMorgan Chase & Co. (JPM) y Goldman Sachs Group Inc. (GS) se apresuran a hacerse de la propiedad total de sus empresas en China, algunas compañías están desinvirtiendo.

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En marzo, la alemana Fraport AG (FRA) vendió su participación en el aeropuerto de Xi’an a un comprador local, poniendo fin a una etapa de 14 años en China. El operador aeroportuario dijo que había decidido abandonar el mercado chino tras tener dificultades para expandir su negocio. Fraport también posee una participación en el aeropuerto de San Petersburgo, en Rusia, que actualmente no puede vender.

Otros se están preparando para la desvinculación de China con Occidente. La empresa de tecnología de autoconducción TuSimple Inc. (TSP) está considerando la posibilidad de separar sus operaciones en China en una entidad independiente, tras la preocupación de las autoridades estadounidenses por el acceso de Pekín a sus datos. El gigante petrolero Cnooc Ltd. (0883) podría abandonar sus operaciones en el Reino Unido, Canadá y EE.UU. por temor a que los activos puedan ser objeto de sanciones, según informó Reuters la semana pasada.

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Los profesionales de la inversión de un fondo de capital privado estadounidense en Hong Kong no están buscando oportunidades en China de forma tan agresiva como antes, a pesar de que los precios son mucho más bajos, según una persona que pidió no ser nombrada para hablar de estrategias internas. Las preocupaciones incluyen la dificultad de salir de las inversiones y los problemas que pueden surgir de un endurecimiento de las posiciones, como las prohibiciones de inversión en EE.UU. o un boicot de los consumidores a los productos fabricados en China.

A medida que aumentan los riesgos y disminuyen los beneficios, añadir exposición a China puede dejar de ser una obviedad para los inversores globales. En un discurso pronunciado la semana pasada, la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, pidió cuentas a Pekín por su relación cada vez más estrecha con Moscú.

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“La actitud del mundo hacia China y su disposición a aceptar una mayor integración económica puede verse afectada por la reacción de China a nuestro llamamiento a una acción decidida sobre Rusia”, dijo.

-Con la asistencia de Maria Elena Vizcaino.

Este artículo fue traducido por Andrea González