Bloomberg — Se espera que la Cámara Baja del Congreso de Chile vote el lunes propuestas rivales de nuevos retiros de pensiones en la mayor prueba de fuerza que enfrenta el presidente Gabriel Boric en sus cinco semanas de Gobierno.
Está previsto que los legisladores comiencen a debatir a las 3 p.m., hora local, una amplia legislación que abriría el camino a nuevos retiros por hasta US$15.000 millones, según cálculos oficiales. A continuación, los diputados debatirán y votarán un plan alternativo presentado por el Gobierno, que permitiría a los trabajadores acceder a unos US$3.000 millones en fondos para la jubilación.
La propuesta más amplia, que se presentó como una enmienda constitucional y puede utilizarse más fácilmente para el consumo, necesita una mayoría de tres quintos para avanzar. El plan respaldado por el Gobierno, que limitaría los retiros al pago de deudas, pensiones alimenticias o primera vivienda, entre otros, solo necesita una mayoría simple.
La votación se perfila como una prueba de fuego para las habilidades políticas del nuevo Gobierno de izquierda en un momento en que los índices de aprobación de su líder de 36 años se han desplomado en medio de la creciente inflación mundial y de un proceso polarizador de redacción de una nueva Constitución. También se corre el riesgo de dar un nuevo golpe a un sistema privado de pensiones que ha sido la base de los mercados de capitales locales y se ha utilizado como modelo en otras naciones.
Tres rondas anteriores de retiros inyectaron US$50.000 millones en uno de los países más ricos de América Latina desde el comienzo de la pandemia, lo que provocó el sobrecalentamiento de la economía y contribuyó a impulsar la inflación al nivel más alto desde 2008.
Sin embargo, poner dinero en los bolsillos de la gente es una idea que muchos legisladores encuentran difícil de resistir. El propio Boric respaldó una fallida propuesta de un cuarto retiro en diciembre cuando aún era diputado, diciendo que estaba comprometido con “la gente y sus necesidades”.
Después de ganar la segunda vuelta presidencial el mismo mes, el nuevo jefe de Estado y sus asesores más cercanos dijeron que se opondrían a la legislación que permitía retiros adicionales.
En medio de las dificultades para unir a los legisladores en contra de un nuevo retiro, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, sorprendió a los chilenos la semana pasada al presentar el plan del Gobierno. Dijo que era fruto de negociaciones con los legisladores y que ayudaría a la población sin aumentar los precios al consumidor.
El Gobierno también respalda una propuesta que protegería los ahorros de pensiones de la expropiación, en un intento por obtener el apoyo de los legisladores de derecha.
El producto interno bruto de Chile registró un crecimiento récord del 11,7% el año pasado, en gran medida gracias a los estímulos temporales para hacer frente a la pandemia de coronavirus y a los retiros anticipados de pensiones. La inflación anual llegó al 9,4% en marzo, el nivel más alto de los últimos 14 años.
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