Buenos Aires — En un contexto en el que las formas de trabajo experimentaron cambios tras la llegada de la pandemia, el 47% de los jóvenes encuestados prefiere una modalidad híbrida, de acuerdo con un sondeo realizado por el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA).
Además, según se desprende del estudio, hay un 45% que elige la virtualidad de forma exclusiva.
“La remuneración acorde a sus expectativas, flexibilidad horaria y participación en proyectos relevantes son algunos de los motivos por los que los jóvenes eligen permanecer en las organizaciones”, puntualizó el informe.
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Además, aseguró: “El 80% de los encuestados asumiría una posición de liderazgo como parte del cambio natural en el camino del desarrollo profesional”.
“El desarrollo de talento es una de las grandes preocupaciones de los jóvenes hoy en día y las nuevas generaciones tenemos otras motivaciones en la nueva normalidad post pandemia”, evaluó Cristina Autorino, líder de IDEA Joven y Referente de Relaciones con entidades en Telecom Argentina.
En ese sentido, consideró: “Este relevamiento es muy importante para dar a conocer cómo pensamos y que las empresas puedan plantear modalidades de trabajo y planes de carrera acordes a las expectativas”.
Modalidad de trabajo
Entre los principales resultados, se encuentra que el 47% de los jóvenes tiene preferencia por un formato híbrido de trabajo, según preferencia individual o del equipo, seguido por un 45% que elige la virtualidad de forma exclusiva.
“La presencialidad exclusiva sólo fue ponderada por el 2% de la muestra”, indicó y puntualizó: “El 50% de los encuestados señaló que las instancias de relacionamiento (con clientes, proveedores, colaboradores, pares) son el principal motivo que justifica la presencialidad”.
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En tanto, el 30% analizó que, actualmente, ninguna situación o aspecto lo amerita.
Liderazgo de las personas
Ante la pregunta sobre si asumirían un rol de liderazgo, “el 80% respondió que sí, ya que resulta un cambio natural en el camino del desarrollo profesional y es una forma de desplegar su vocación de servicio de desarrollar a otras personas”.
“Sin embargo, el 20% que contestó de forma negativa indicó, entre los principales motivos, que la posición de liderazgo implica un mayor nivel de responsabilidades, presiones y estrés. No forma parte de sus objetivos profesionales y no permite un balance entre vida personal y profesional”, explicó.
“Desglosado según género, el 38% de las mujeres manifestó interés por un rol de liderazgo de personas, mientras que en el caso de los hombres fue el 42%”, manifestó.
El estudio también dio a conocer que “en ambos casos, un 6% respondió que le interesa un rol de liderazgo que no implique gestión de personas”.
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