Bloomberg — La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, convocará una reunión de altos funcionarios financieros internacionales la próxima semana para abordar una crisis mundial de seguridad alimentaria, mientras que los jefes de instituciones, incluido el Fondo Monetario Internacional (FMI), instan a tomar medidas para abordar las terribles consecuencias de los aumentos récord de precios causados por la invasión rusa de Ucrania.
“Con más de 275 millones de personas que enfrentan una inseguridad alimentaria aguda, estoy profundamente preocupada por el impacto de la guerra de Rusia en los precios y el suministro de alimentos, particularmente en las poblaciones pobres”, dijo Yellen en un discurso ante el grupo de expertos Atlantic Council en Washington, el miércoles.
La cumbre sobre alimentos de la próxima semana tendrá lugar en Washington junto con las reuniones de primavera del FMI y el Banco Mundial. Entre los participantes estarán ministros representantes del G-7 y G-20, dijeron la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, y el presidente del Banco Mundial, David Malpass, según la vocera del Tesoro, Alexandra LaManna.
Georgieva, Malpass, el director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, David Beasley, y el director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, emitieron un comunicado conjunto pidiendo a la comunidad internacional que apoye a los países vulnerables a través de subvenciones para cubrir necesidades financieras urgentes.
‘Aumentando la presión’
Los altos precios de los alimentos y la escasez de suministros están “aumentando la presión sobre los hogares en todo el mundo y empujando a millones más a la pobreza”, dijeron los líderes, y agregaron que sus instituciones están listas para enfrentar la crisis. “La amenaza es mayor para los países más pobres con una gran parte del consumo de alimentos importados, pero la vulnerabilidad está incrementándose rápidamente en los países de medianos ingresos, que albergan a la mayoría de los pobres del mundo”.
Hablando en una sesión de preguntas y respuestas después de su discurso en el Atlantic Council, Yellen dijo que “esta será una preocupación urgente para nosotros la próxima semana para tratar de pensar en cómo podemos evitar el hambre en todo el mundo”.
El aumento vertiginoso de los precios de los alimentos contribuirá a llevar a la pobreza a más de 250 millones de personas adicionales en todo el mundo este año, advirtió el grupo de caridad Oxfam International a principios de esta semana.
Ucrania y Rusia se encuentran entre los cinco principales exportadores de cereales, y la guerra plantea un fuerte golpe tanto a la producción como a los envíos, provocando que los precios de la comida trepen a su ritmo más rápido hasta ahora. Varios países, incluidos Egipto, Turquía, Bangladesh e Irán, compran más del 60% de su trigo a Rusia y Ucrania, según un informe de las Naciones Unidas
La comitiva en Washington discutirá “la respuesta urgente a la actual crisis de seguridad alimentaria que se ha visto gravemente exacerbada por la invasión de Rusia a Ucrania”, dijo LaManna.