Guatemala — La tradición de los Gateadores de San Andrés Sajcabajá, Quiché, fue declarada como Patrimonio Cultural Intangible de la Nación.
Según el Ministerio de Cultura, se trata de un grupo de hombres que gatean por aproximadamente 1.5 kilómetros con dos coronas de espinas amarradas al cuerpo, previo un proceso de preparación espiritual que ocurre durante la Cuaresma.
El ritual que simboliza la pasión, muerte y resurrección de Cristo se lleva a cabo desde hace más de 200 años en el municipio de Quiché, durante el Viernes Santo.
Ese día, los participantes se cubren el rostro con pañuelos para que nadie reconozca su identidad durante la conmemoración.
Cada uno de ellos necesita el apoyo de dos personas que los ayudan al cambiar de lugar unas mantas sobre las que gatean, de manera que la dejada atrás es colocada delante del gateador.
Además, el hecho de ser miembro de este grupo conlleva el compromiso de participar por siete años consecutivos en la tradición.
Tradición que trasciende
La declaratoria se llevó a cabo el 8 de abril, en el Patio de la Vida, en Palacio Nacional de la Cultura, para dar a conocer el acuerdo gubernativo 296-2022, que le da la calidad de Patrimonio Cultural Intangible de la Nación.
El Ministerio de Cultura informó que la tradición conservada por generaciones tiene significados sociales, históricos, culturales y espirituales dentro del sincretismo guatemalteco.
Además, buscan que el acto de penitencia sea declarado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Las autoridades se comprometieron a trabajar en la protección del ritual para garantizar que continúe vigente durante más generaciones.
Mario Maldonado, viceministro de Patrimonio cultural y natural, mencionó a una radio local que es importante el reconocer como patrimonio Intangible de la Nación una tradición tan importante garantizando procesos que permitan su conservación y que sea trasladado a las futuras generaciones.
El funcionario detalló que los gateadores ya habían presentado una solicitud para ser reconocidos como patrimonio y que todo llevó un proceso de validación.