QUITO — Las remesas que envían los emigrantes ecuatorianos siguen siendo un motor para el país y el segundo rubro de ingreso de divisas luego de las exportaciones. En 2021 batieron récord al alcanzar los US$ 4.362,4 millones, un 30,7% más que en el año previo.
Según el Banco Central del Ecuador, aquello se debe a la reactivación económica de los países en los que residen los connacionales (Estados Unidos, Italia y España), así como a las medidas de apoyo de los gobiernos de estos países.
4,1% DEL PIB NACIONAL
Las remesas, que son en principal ingreso secundario del país, registraron un crecimiento interanual de US$ 1.024,6 millones respecto a 2020. Es más, “el déficit de ingreso primario y el de la balanza de servicios fueron compensados por el ingreso secundario, debido al importante repunte de las remesas recibidas durante 2021″, indica un reporte del BCE.
La evolución favorable de esta variable se presentó especialmente a partir del segundo trimestre del 2021, con valores superiores a los US$ 1.000 millones en cada trimestre. De esta forma, el flujo de remesas recibido en 2021 marcó, a año seguido, un récord histórico, al representar el 4,1% del valor estimado del PIB para 2021.
Desde el año 2000, las remesas de los emigrantes han sido la segunda fuente de ingreso de divisas y desempeñan un rol importante en la economía, pues dinamizan el consumo y promueven la inversión.
La participación por país del flujo de remesas en 2021 mostró que EE.UU. representó el 63,5%, España 20,8%, Italia 4,4% y el resto del mundo 11,3%.
¿POR QUÉ SON IMPORTANTES LAS DIVISAS?
Según diversos estudios, las divisas que envían los inmigrantes desde el exterior a sus países de origen actúan como un mecanismo de financiamiento especialmente para los estratos más vulnerables al aumentar su nivel de ingresos y permitir a las familias hacer frente a las crisis. Asimismo, son una herramienta contra cíclica para que las familias enfrenten shocks externos que pueden afectar su bienestar.
Eso explica por qué el consumo de los hogares fue el componente que empujó la economía en 2021. Este rubro aumentó en 10,2% y contribuyó en 6,3% a la variación del PIB nacional, que creció 4,2% el año pasado. En el consumo de los hogares se cuentan precisamente las remesas recibidas, además de los créditos de consumo y las importaciones de bienes de consumo.
La Asobanca explica que en un contexto de dolarización como el ecuatoriano, el ingreso de estas divisas fortalece el consumo, la liquidez y, por tanto, incide en el desempeño del PIB, como está demostrado.
REMESAS ENVIADAS Y POSIBLES PROBLEMAS
Respecto a las remesas enviadas desde el Ecuador, ese flujo ascendió a US$ 595,1 millones, con un incremento del 17,20% respecto a 2020. Estos flujos fueron enviados mayoritariamente a:
Colombia: 60,63%
México: 12,61%
Perú: 10,37%
En conjunto, estos tres países ascienden a US$ 497,54 millones, es decir 83,61% del total remitido al exterior.
Sin embargo, el conflicto afectará negativamente las proyecciones de crecimiento mundial, incluidas las remesas, de acuerdo con análisis preliminares del FMI. El impacto vendría por tres vías: mayores precios de commodities como los alimentos y energía, que presionarán al alza a la inflación; las economías cercanas a los países en conflicto tendrán que enfrentar problemas de cadena de suministro, comercio interrumpido, menores flujos de remesas y una mayor cantidad de refugiados