Bloomberg Línea — Mayores tasas de vacunación contra el Covid-19 y un control de los contagios han contribuido a que el turismo se reactive a nivel global, pero no solo ocurre con los viajes de vacaciones y descanso, sino que también las tasas de recuperación se están reflejando en el turismo de negocios, aunque de una manera más lenta.
Informes recientes de la Asociación Global de Viajes de Negocios (GBTA, por sus siglas en inglés) aseguran que este tipo de turismo tendrá un aumento del 38% en 2022, continuará la recuperación en 2023 y llegará a un nivel prepandémico en 2024, con un nivel de negocio que puede llegar a los US$1,4 billones a nivel mundial.
Estas proyecciones también son posibles debido al relajamiento de las medidas para viajeros internacionales que se han implementado en la mayoría de los países, en donde el carné de vacunación es suficiente para entrar a un Estado o una prueba negativa otorga el estatus para que el viajero ingrese a ese territorio.
La última encuesta de la GBTA resalta el optimismo de las empresas de gestión de viajes, pues el 78% de estas cree que el sector del turismo corporativo seguirá en recuperación este año. Además, “cuatro de cada cinco (82%) de los encuestados sienten que sus empleados están ‘dispuestos’ o ‘muy dispuestos’ a viajar por negocios en el entorno actual, en comparación con el 64%” de una encuesta realizada en enero.
Los resultados también reflejan que las reservas están incrementando, pues “en promedio, los compradores de viajes dicen que las reservas de viajes de negocios de su empresa están en un 33% de su nivel anterior a la pandemia, mientras que los proveedores de viajes informan que sus reservas de viajes de negocios han regresado al 42% en comparación con los niveles anteriores a la pandemia”.
Los desafíos para los viajes de negocios
Aunque las reservas crecen y el optimismo de los agentes involucrados con este sector se encuentran en buenos niveles, la recuperación del sector turismo en general será “desigual” en 2022, según un informe de la agencia Moody’s publicado a inicios de año.
Un artículo publicado recientemente en el medio británico The Economist señaló que aún con la recuperación de la demanda aérea, las aerolíneas siguen operando dos tercios de su capacidad antes de la pandemia, razón por la que para un empleado “resultará más difícil planear un viaje”, incluso si el supervisor lo aprueba.
Pero no se trata solo de la gestión del turismo corporativo. Una encuesta de la financiera Morgan Stanley, citada en el texto, asegura que para el 2022 los presupuestos para viajes de negocios de empresas norteamericanas pueden estar un 31% por debajo del nivel de 2019.
Pese a esto, la tendencia de mejora en el turismo corporativo se mantiene e incluso, debido a la inclusión del teletrabajo en la dinámica de la mayoría de empleados, la encuesta de la GBTA señala que un 82% de los gerentes de viajes piensa que sus empleados ‘están igualmente interesados’ (53%) o ‘mucho más interesados’ (29%) en combinar viajes de negocios con ocio”, lo que resulta relevante para el sector turismo en general.
Un documento del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), publicado en febrero, señaló que el PIB turístico de América Latina crecería un 48,2% en 2022 (frente a 2020), alcanzando los US$233 billones en el año. Sin embargo, el crecimiento previsto para este 2022 todavía se encontraría un 12,7% por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.
Por último, la consultora SAP Concur señaló en las últimas semanas que los viajes de negocios seguirán en tendencia porque los empresarios “saben que hay más opción de cerrar acuerdos comerciales de manera presencial”, según se describe en un comunicado.
Sin embargo, el mismo documento destaca que las empresas aprobarán solo los viajes necesarios de este tipo y habrá una mayor consciencia del gasto.
