Ciudad de México — El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, conocido como AMLO, y el enviado especial de Estados Unidos sobre el Clima, John Kerry, sostuvieron una reunión para abordar 10 puntos básicos sobre energía y medio ambiente relevantes para ambas naciones.
El mandatario y su equipo energético discutieron los temas durante cinco horas junto con el embajador Ken Salazar y empresarios de Estados Unidos sobre la reforma eléctrica, inversiones de empresas estadounidenses, medio ambiente y permisos a compañías en Palacio Nacional en al Ciudad de México.
Permisos
López Obrador dijo que su Gobierno respetará los permisos de cinco compañías para importar combustible: ExxonMobil, Valero, Koch, Shell y Tesoro. Agregó que retirarán denuncias y levantarán clausuras existentes como gesto de buena voluntad, pero si hay reincidencias en robo de combustible o contrabando habrá sanciones penales incluida la revocación de permisos.
Las terminales de almacenamiento de combustibles sin permiso solo tendrán como opción que la empresa estatal Pemex, con previa evaluación y necesidad, las compre, señaló.
Otro punto que presentó México a los representantes de la administración de Joe Biden fue que no habrá más permisos energéticos a las empresas.
“Las nuevas nuevas solicitudes o permisos en trámite no se otorgarán porque queremos lograr la autosuficiencia energética y fortalecer a Pemex y a la CFE, es decir, tendrán prioridad las empresas públicas por el bien del pueblo y de la nación”, según el documento presentado por el presidente.
El Gobierno mexicano dijo estar disupuesto a dialogar con las empresas estadounidenses sin actos de injusticia o arbitrariedad para impulsar la integración económica y comercial de ambos países sin actos ilegales ni de corrupción.
Reforma eléctrica
Sobre la reforma eléctrica, AMLO señaló que se pretende dar el 46% del sector a empresas privadas y el 54% restante a la empresa estatal CFE en un mercado que crecerá 4% anual.
“No se trata de una inciativa estatista ni expropiatoria”, puntualizó el político tabasqueño.
Inversiones
El Gobierno mexicano manifestó a Kerry que solo dos compañías estadounidenses con contratos petroleros derivados de la reforma energética de 2013 han invertido en México. “Pedimos a las petroleras con contratos para extraer petróleo y gas que inviertan”, expresó.
López Obrador dijo que si Talos Energy desiste en el arbitraje que tiene contra México, luego de que la Secretaría de Energía (Sener) decidió que la empresa estatal Pemex opere el megacampo marino Zama, el regulador Comisión Nacional de Hidrocarburos puede resolver “rápidamente” para que inicien los trabajos y el yacimiento tenga producción en este sexenio, pues solo se necesita inversión de Talos, otra empresa o algún fondo de inversión.
Zama es uno de los descubrimientos petroleros más grandes en la década pasada, con volumen recuperable 550 y 650 millones de barriles de petróleo crudo equivalente con un valor presente neto de 4.835 millones de dólares después de impuestos, con una tasa interna de retorno 49,6%.
El titular del poder ejecutivo en México señaló el caso de la empresa estadounidense Sempra Energy con CFE y sus acuerdos sobre gasoductos, tres proyectos de plantas de licuefacción de gas en Topolobampo, Salina Cruz y Coatzacoalcos para reexportarlo a Asia, América y Europa.
Las empresas interesadas deberán llegar a un acuerdo con CFE “a más tardar en un mes, dijo.
López Obrador presentó al enviado especial de EE.UU la posibilidad de acuerdos conjuntos con empresas para la producción de energía con modernización de turbinas equipos existentes, fotovoltiacas flotantes en embalses de presas, cuyas inversiones garantizadas con la compra de energía que produzca CFE.
El Gobierno también invitó a las empresas estadounidenses a invertir en el parque fotovoltaico más grande de América Latina de 1.000 MegaWatts de capacidad en Sonora.
Medio ambiente
López Obrador destacó ante Kerry, Salazar y empresarios que México cuenta con el programa de reforestación más importante del mundo, Sembrando Vida, con una inversión de US$1.500 millones.
Pemex, dijo el presidente, racionará su producción petrolera sin rebasar los dos millones de barriles diarios a pesar de contar con reservas que permitirán aumentar producción, tampoco autorizará fracking, además de la modernización de las refinerías con la intención de construir plantas coquizadoras en Tula y Salina Cruz para reducir la producción de combustóleo, un petrolifero altamente contaminante y con el que Pemex pierde dinero.
Esta nota se actualizó a las 13:15 horas en el primer y séptimo párrafo con un punto adicional sobre los temas.
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