Bloomberg — Incluso los alimentos básicos cultivados en Rusia están experimentando un aumento vertiginoso en sus precios, lo que brinda una idea de las dificultades que les esperan a los consumidores después de que las oleadas de sanciones por la invasión de Ucrania desataran shocks de suministro y una fuerte devaluación de la moneda.
La mayoría de los ingredientes necesarios para hacer borscht, el popular plato en Rusia y gran parte de Europa del Este, experimentaron aumentos de precios de dos dígitos en una sola semana: las cebollas subieron más del 18% y el repollo casi un 16%. Los residentes de algunas regiones tuvieron que desembolsar más del 40% más para algunos de los alimentos básicos necesarios para cocinar el popular plato, que también contiene remolacha, papas y zanahorias.
Los precios al consumidor en general subieron un 1,16% en los siete días que terminaron el 25 de marzo, un poco menos que el 1,93% de la semana anterior, dijo el miércoles el Servicio Federal de Estadísticas. En términos anuales, la inflación alcanzó el 15,7%, según el Ministerio de Economía, en comparación con el 14,5% al 18 de marzo.
Los terribles costos económicos de la guerra del presidente Vladimir Putin en Ucrania se están volviendo claros luego de provocar una multitud de sanciones que empujaron a que las empresas extranjeras se retiraran del país. Los aumentos en lo que se conoce como la “canasta de borscht” de productos básicos afectan de manera desproporcionada a los rusos en peores condiciones y pueden traducirse en expectativas de inflación aún más altas.
Los minoristas se están enfrentando a un déficit de verduras, incluidas la col y las zanahorias, según Kommersant (diario ruso), ya que Rusia agota las existencias de la cosecha nacional del año pasado y aún no están listos los suministros frescos de los productores extranjeros. El Ministerio de Agricultura trató el miércoles de asegurar a los rusos que no habría escasez de verduras, culpando de los precios más altos a factores estacionales y diciendo a Interfax el miércoles que los envíos de la nueva cosecha estabilizarán la situación.
Una encuesta a analistas realizada por Bloomberg este mes mostró que la inflación puede promediar un 20% este año. Sería la cifra más alta en unas dos décadas. La economía de Rusia está en camino de contraerse en dos años consecutivos por primera vez desde el colapso que siguió a la ruptura soviética hace tres décadas.
Una ola de compras de pánico que se apoderó de Rusia después de su ataque a Ucrania a fines de febrero provocó inicialmente un aumento dramático en el costo de bienes duraderos como automóviles y televisores. Pero es el costo de los bienes básicos lo que ahora está bajo presión a medida que los consumidores intentan abastecerse para el futuro.
Los precios del azúcar subieron un 6,5% en promedio en la semana al 25 de marzo. Los fósforos se encarecieron un 3,3% y el papel higiénico subió un 2,9%.
Este artículo fue traducido por Miriam Salazar