QUITO — Francisco Jiménez es el nuevo ministro de Gobierno de Ecuador. Su posesión está prevista para la tarde de hoy. Y aunque el decreto de su designación aún no ha sido publicado, el oficialismo y el propio Jiménez lo han confirmado.
En declaraciones a la prensa, Jiménez ha señalado que su trabajo será tender puentes entre el Ejecutivo y el Legislativo. “Estamos claros que las últimas semanas han sido un poco convulsionadas y creo que ese ambiente de tensión debe bajar para el bien de todos”, indicó.
Y aunque dijo que se ajustará al discurso del presidente Lasso de no contar en adelante con la Asamblea, también insistió en que “debemos trabajar para buscar la manera de colaborar entre ambos poderes institucionales”.
“Creo que eso es importante para el Ecuador y sobre todo para la estabilidad política que necesita el Gobierno del Encuentro”, apuntó. Para Jiménez, es necesario concentrarse “en los problemas de fondo del país”, como “el combate a la pobreza, los problemas de seguridad y los problemas de baja calidad de los servicios públicos”.
Jiménez, que actualmente se desempeña como legislador, dejará su cargo para reemplazar a Alexandra Vela en el gabinete, quien renunció la noche del martes por no estar de acuerdo con la línea política del mandatario ecuatoriano.
Vela indicó que su retiro se debe a que el presidente Lasso no aceptó su sugerencia de llamar a muerte cruzada y disolver el Legislativo ante el bloqueo político que enfrenta. “En muchas reuniones con tozudez he sostenido que, para el bien de su gobierno, las reformas que necesita la economía y la permanencia de la democracia es mejor la ‘muerte cruzada’”, dijo en una carta.
Los cambios ministeriales se dan en medio de una intensa crisis política entre el Ejecutivo y el Legislativo luego de que la Asamblea no aprobara la ley de inversiones presentada por Lasso. Pero el tema se complicó aún más tras la denuncia del presidente contra cinco asambleístas a quienes acusó de pedir favores a cambio de votos.
La mañana de este martes, Lasso advirtió que en adelante gobernará como si el Legislativo no existiera ante el bloqueo político permanente que vive su Gobierno. Esas declaraciones también ocasionaron incomodidad entre los parlamentarios. Por ahora, las investigaciones sobre la denuncia de Lasso avanzan en la Fiscalía y ambas partes han declarado que están dispuestas a cooperar.