Montevideo — El ministro de Industria uruguayo Omar Paganini afirmó sobre el mediodía de este miércoles en una conferencia de prensa que el Poder Ejecutivo está próximo a tomar una “decisión final” sobre el nuevo ajuste de combustibles a implementarse desde el 1° de abril.
El gobierno, dijo el secretario de Estado, busca “que se minimice” en el precio final el impacto del alza del valor internacional del crudo, que en Uruguay es importado y refinado en la petrolera estatal monopólica Ancap. Además, si bien no avanzó en mayores detalles, señaló que el incremento será menor a los $15 para el gasoil y $7,6 para las naftas sugerido por la Unidad Reguladora de los Servicios de Energía y Agua (Ursea), el regulador estatal que asesora pero no es vinculante para la fijación de precios de combustibles.
“Estamos avanzados en la toma de decisión, pero faltan algunas últimas vueltas. Probablemente mañana (por este jueves 31) ya esté la decisión final”, dijo Paganini. “Este aumento muy fuerte del petróleo proyecta aumentos muy fuertes de los combustibles, y el gobierno está haciendo el máximo esfuerzo para que se minimice lo más posible el impacto en la población”, agregó.
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El presidente Luis Lacalle Pou estuvo reunido sobre el mediodía de este miércoles con Paganini, la ministra de Economía, Azucena Arbeleche, y el ministro de Ganadería, Fernando Mattos, para analizar tanto el incremento de los combustibles como medidas para atenuar los incrementos de precios en harinas y aceites vegetales.
El informe mensual de la Ursea establece el precio de paridad de importación (PPI), que determina el valor teórico que tendría el combustible en Uruguay es caso de que fuera importado del mercado más competitivo.
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Por estas horas, a través de ANCAP, el gobierno analiza habilitar determinados niveles de endeudamiento de la empresa estatal para subsidiar el combustible, aunque Paganini enfatizó que a largo plazo esa herramienta “no se puede sostener”. En el Poder Ejecutivo también miran los mercados internacionales a la espera de que la volatilidad ceda, y así lograr precios más bajos.
Con base en el informe de Ursea, los incrementos deberían ser de $15 para el gasoil y $7,5 para la nafta. En tanto, la petrolera estatal ANCAP sugirió, a partir de sus costos aumentos, de $10 en el gasoil y $5 para las naftas. “La definición va a tener el máximo esfuerzo para que sea menor este impacto”, insistió el ministro.
El anterior incremento fue desde el 1° de marzo. La nafta súper cuesta en la actualidad $74,88 por litro y el gasoil $53,99 por litro. Esos precios fueron fijados tras un aumento de 2% desde el valor de febrero a marzo. En dólares, la nafta pasó a costar US$1,76 el litro y el gasoil US$1,27 el litro.
En la reunión de Lacalle Pou con integrantes de su gabinete también analizaron el impacto en el mercado local del precio de la harina y el aceite y buscan contener las subas.
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