Ciudad de Panamá — Ante el alza constante del precio de los combustibles los transportistas panameños no dan marcha atrás e insisten en que el gobierno congele los precios del diésel y de la gasolina, en $2.40 y $3.00, respectivamente, amagando con paralizar el transporte público.
Para tratar de paliar esta situación y que el tema no haga combustión, el gobierno les había ofrecido un subsidio de $5 millones que luego aumentó a $6 millones, pero sin cambio de ruta, pues los transportistas insisten en mantener la vía del congelamiento de los precios del combustible.
En 2021 los transportistas se vieron beneficiados con un subsidio de $3 millones, por lo que ahora, según se informó, se manejan varias alternativas en una mesa de diálogo que debe tener un pronunciamiento oficial este 31 de marzo.
En Panamá se paga un impuesto de 60 centavos de dólar por galón gasolina y 25 centavos por el diésel, por lo que congelar los precios causaría un sacrificio fiscal de varios millones de dólares.
“Los transportistas estamos teniendo pérdidas del 60%, ya que el precio del combustible se lleva la mayor parte de las ganancias diarias que podamos hacer”, comentó el conductor de taxi, Juan Salas
Insistió en que para solventar esta situación solo hay dos vías: bajar el precio de la gasolina y del diésel o aumentar el precio del pasaje, que según la ley debe ser revisado cada 5 años.
En enero de este año en el país se vendieron 89,335 galones de combustible, cuando en la misma fecha de 2021 la cifra se estabilizó en 59,646 galones, siendo el diésel bajo en azufre y la gasolina de 95 octanos los que más se comercializan.
Del diésel bajo en azufre se vendieron en enero de este año 29,519 galones, mientras que de la gasolina de 95 octanos 17,842 galones, detalla el Instituto Nacional de Estadística y Censo.
La información oficial también revela que del búnker C se vendieron 8,680 galones, versus los 846 galones durante el 2021.
De gas butano se comercializaron 6,121 galones, cifra que registró un ligero aumento respecto a los 6,127 del año pasado, que incluye la venta a granel y en cilindros.
Los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania ya se deja sentir en Panamá, donde diariamente se consumen, no ingesta, unos 700 mil barriles de diésel y 600 mil de gasolina.
El tema del precio del combustible acelera las negociaciones entre gobierno y transportistas, mientras que los usuarios del transporte público aseguran que no permitirán un alza en el pasaje, una alternativa que el gobierno trata de evitar, de acuerdo con el director de la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre, Carlos Ordoñez.
