San Salvador — En respuesta a un repunte significativo de homicidios el viernes y el sábado, el presidente de la República Nayib Bukele solicitó a la Asamblea Legislativa decretar el Régimen de Excepción.
El viernes la Policía Nacional Civil reportó 14 asesinatos y el sábado finalizó con 62, el día más violento en los últimos años. Las cifras se encuentran muy por encima del promedio de 2021, que fue de 3,12 muertes violentas diarias.
Bukele acusó a las pandillas por la ola de muertes violentas y llamó a activar el Artículo 29 de la Constitución, que permite la suspensión de garantías constitucionales “en casos de guerra, invasión del territorio, rebelión, sedición, catástrofe, epidemia u otra calamidad general, o de graves perturbaciones del orden público”.
En respuesta, los legisladores convocaron a una sesión de emergencia a las 11 de la noche del sábado para discutir el decreto, el cual recibió la aprobación la madrugada del domingo y la sanción de Bukele por la mañana. El estado entró en vigor de manera inmediata por un plazo de 30 días.
El Régimen de Excepción le ha otorgado al gobierno las facultades de limitar el derecho de asociación y de reuniones, así como la inviolabilidad de la correspondencia.
Además, suprime los derechos vigentes en las detenciones y prolonga el tiempo máximo de la detención administrativa de las 72 horas hasta los 15 días.
La Asamblea Legislativa decidió mantener las garantías constitucionales para el ingreso y salida del territorio así como la libertad de expresión.
Por otro lado, el mandatario pidió a la Policía Nacional Civil (PNC) y a la Fuerza Armada a “dejar que los agentes y los soldados hagan su trabajo y deben defenderlos de las acusaciones de quienes protegen a los pandilleros”.
Durante el sábado y la madrugada del domingo, la PNC efectuó operativos para detener a cabecillas y miembros de pandillas supuestamente responsables de ordenar o ejecutar los homicidios, la mayoría pertenecientes a la Mara Salvatrucha y la Mara 18.
“No retrocederemos en esta #Guerracontrapandillas, no vamos a descansar hasta capturar y llevar ante la justicia a los criminales responsables de estos hechos”, publicó la PNC en su cuenta institucional de Twitter.
El gobierno implementa un Plan de Control Territorial que, según las autoridades, logró reducir las muertes violentas desde 2.398 en 2019, año en el que asumió Bukele, a 1.140 en 2021. Esto significó pasar de un promedio de 6,56 asesinatos diarios a 3,12, respectivamente.
Según la Carta Magna, el Régimen de Excepción puede ser extendido por un plazo adicional de 30 días mediante nuevo decreto si persisten las causas que lo motivaron.
--ACTUALIZACIÓN: Esta nota ha sido actualizada a las 9:30 AM del domingo 27 de marzo para informar sobre la aprobación del decreto, actualizar las garantías constitucionales suspendidas y las cifras de homicidios al cierre del sábado. Su título original era: El Salvador se apresta a declarar Régimen de Excepción ante ola de homicidios.
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