San Salvador — La canasta de alimentos salvadoreña resintió en febrero el mayor aumento de la inflación en toda una década. El mes pasado este indicador puntuó 9,45% en su variación interanual, según cifras del Banco Central de Reserva (BCR).
El último incremento de precios cercano a esta magnitud se remonta al año 2011, cuando el sector de Alimentos y bebidas no alcohólicas registró inflaciones interanuales de 10,13% (mayo) y 9,77% (agosto).
El promedio general del Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue de 6,67% en febrero y se convirtió así en el tercer mes con la inflación más alta desde 2010 hasta la fecha, en el historial del BCR.
Entre 12 sectores que componen el IPC, el de mayor encarecimiento a febrero fue el de Transporte, con 9,61%, seguido de los alimentos (9,45%) y de la categoría de Muebles, artículos para el hogar y la conservación ordinaria del hogar.
Los productos para el hogar vieron la inflación más alta de su historia en enero de este año, con 8%, y en febrero retrocedieron a 7,82%.
Por encima del promedio del IPC a febrero también se situaron las áreas de Restaurantes y hoteles (7,03%) y casi alineado estuvo la de Recreación y cultura (6,5%).
Por debajo de la inflación general quedaron los rubros siguientes: Alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles (4,86%), Bienes y servicios diversos (4,45%), Prendas de vestir y calzado (3,65%), Salud (2,39%) y Bebidas alcohólicas y tabaco (2,38%).
Las únicas categorías que han mantenido precios estables en el último año fueron las de Educación (0,05%) y Comunicaciones (-0,1%).
Propuestas y medidas
El aumento de precios es uno de los temas que preocupa a la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador. La perspectiva de corto plazo es que los precios de alimentos y combustibles sigan aumentando como efecto del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
“Ahora con la invasión de Rusia a Ucrania hay muchos productos de la canasta básica, productos primarios, que van a subir de precio y ya estamos viendo un impacto sobre eso”, dijo Carmen Irene Alas, vicepresidenta de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador.
Ante este panorama, Alas propuso a las autoridades que impulse medidas de austeridad. “Creemos que sí, todos tenemos que apretarnos el cinturón, tanto empresarios como el gobierno y creo que un programa de austeridad por parte del gobierno podría contribuir muchísimo para que todos de forma colaborativa contribuyamos para el bienestar de nuestro país”, planteó Alas.
El gobierno salvadoreño presentó hace una semana un plan de 11 medidas ante la inflación mundial, que comprende acciones como la supresión de aranceles a alimentos de la canasta básica, la eliminación de dos impuestos a los combustibles, subsidios al gas propano, reformas a la Ley del Consumidor, controles más severos al transporte colectivo, entre otras.
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