Bogotá — Marzo es tradicionalmente el mes en el que las grandes empresas del país realizan sus asambleas de accionistas y, además de aprobar la repartición de utilidades, eligen a las juntas directivas que servirán de asesores y guías para los administradores de las compañías.
Pero ser integrante de una Junta Directiva no es tarea fácil. Para no ir muy lejos basta recordar que los directivos del Grupo Empresarial Antioqueño tuvieron que decidir su aceptaban o no la oferta que presentó la familia Gilinski por las acciones del Grupo Sura y del Grupo Nutresa.
La decisión no era fácil, por un lado requerían realizar el análisis de si la oferta resultaba beneficiosa para la compañía, y sus accionistas, en especial los minoritarios, pero, además, debían entender que la movida empresarial significaría una ganancia corporativa que al final le ayudaría a cada una de estas empresas a crecer. Al final, votaron en contra de la venta, pero algunos, partidarios de que vendiera, consideran que, por deber fiduciario, debieron aceptar. Sin embargo, aún hay pendiente una OPA por ser autorizada, y nuevamente tendrán que decidir si aceptan las nuevas condiciones, o no.
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Pero el del GEA no es el único caso de aprietos para las juntas. Tampoco hay que ir muy lejos para recordar a la Junta de EPM y cómo esta tuvo que renunciar en pleno luego de que el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, tomara una decisión que a juicio de los directivos debió ser consultada con la Junta.
Fue tal el malestar de los integrantes de la Junta que Quintero tardó varias semanas en conformar una nueva Junta puesto que por conflictos de interés y por los antecedentes con la Junta que dimitió, varios postulados declinaron la propuesta de integrar la Junta.
Las complejidades para un directivo no se limitan a decisiones de compra y venta, o a enfrentamientos con los dueños por la toma de decisiones, sus compromisos son tan relevantes que una decisión les puede acarrear sanciones, incluso, penales.
Para recordar un caso así basta pensar en la Ruta del Sol II, el polémico contrato por el cual la constructora brasileña Odebrecht fue investigada en Colombia y que a su paso dejó una condena contra José Elías Melo, expresidente de Corficolombiana, una empresa del Grupo Aval, por su participación en el pago de sobornos para la adjudicación de la obra.
Dentro del proceso se investigó a los directivos del Grupo Aval, entre ellos a Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez, aunque finalmente no se formularon cargos y la Fiscalía General de la Nación decidió archivar la investigación en su contra tras no encontrar participación suya en los pagos de coimas.
Así las cosas ser directivo no es tarea fácil, requiere aptitudes y liderazgos difíciles de encontrar, por eso mismo las remuneraciones de los directivos, en especial los de las compañías listadas en BVC suelen ser muy atractivas.
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Aquí un ranking de las empresas del Colcap de BVC que mejor remuneran a sus directivos con base a la información disponible en las páginas web de cada empresa:
· Grupo Nutresa: La compañía tiene definida una remuneración de $12,9 millones por sesión. Sin embargo, el pago también aplica paras sesiones extraordinarias, así como para la participación de los comités que asesoran a la Junta Directiva de la compañía.
· Banco de Bogotá: La entidad, parte del Grupo Aval que controla Luis Carlos Sarmiento Angulo, pagó en 2021 unos $1.351 millones en honorarios a sus directivos. Es decir, la asignación que le correspondió a cada uno es de $135,1 millones al año, y teniendo en cuenta que se reúnen una vez por mes, el pago por sesión alcanzó los $11,2 millones.
· Bancolombia: El pago para los directivos de Bancolombia está pactado en $10,7 millones por cada sesión, comité asesor y sesiones extraordinarias que surjan. Sin embargo, hay que tener presente que esta cifra se revisará en la Asamblea que tendrá lugar este viernes.
· Mineros: La remuneración para los directivos de Mineros está pactada en dólares y se diferencia entre los integrantes de Junta según su rol. El presidente de la Junta tiene una remuneración anual de US$30 mil, los presidentes de los comités de Auditoría y Riesgos reciben un pago de US$25 mil en tanto que los demás miembros de Junta devengan anualmente US$20 mil. Los miembros de los comités reciben US$5.000 por año. Así las cosas, está acordado que el pago por cada sesión de Junta es de US$2.500, esto es alrededor de $9,5 millones.
· Grupo Argos: A cada directivo se le asignará un pago de $8,7 millones por sesión, los cuales deberán ser ratificados por la Asamblea que se reunirá la próxima semana.
· Grupo Sura: Los directivos del Grupo Sura tienen una remuneración de $8,2 millones por cada sesión. Los actuales integrantes serán revisados en la asamblea del próximo viernes 25 de marzo.
· Terpel: La compañía de capital chileno tiene definido que los integrantes de su Junta recibirán 8 salarios mínimos mensual legales vigentes por cada sesión, así las cosas, y tomando como referencia que el mínimo 2022 quedó definido en $1 millón, su paga por cada sesión es de $8 millones.
· Grupo Éxito: El pago se diferencia entre el presidente de la Junta y cada uno de los integrantes. Para el presidente se pagan $11,5 millones por sesión y $7,7 por cada sesión de comité asesor, mientras que para los demás miembros de la Junta se pagarán $7,7 millones por sesión de junta y de $3,8 millones por su participación en los comités asesores.
· Celsia: Es otra de las compañías del GEA, y su remuneración por cada asistencia a Junta es de $7,5 millones.
· Grupo Bolívar: La compañía aún no publica su informe de gestión 2021, y tampoco están los históricos de las votaciones de su Asamblea, sin embargo, en 2020 les pagó a sus directivos $7,4 millones por cada sesión de Junta.
· Cementos Argos: La paga para cada directivo de la cementera está acordada en $7 millones por cada sesión o por la participación en los comités asesores.
· Interconexión Eléctrica (ISA): La remuneración para los directivos se diferencia entre el presidente y los demás miembros. La paga por sesión está pactada en unidades de valor tributario. De 141 UVT para los miembros regulares y de 169 UVT para el presidente, es decir, de $5,3 millones y de $6,4 millones respectivamente.
· Davivienda: La remuneración de Davivienda a sus directivos según sus registros de la página web es de $5 millones por cada sesión.
· Grupo Energía Bogotá: La remuneración por cada sesión de Junta del GEB es de $4,5 millones, aunque está definido que es de 5 salarios mínimos legales, por lo tanto, se ajustaría este año con el incremento del mínimo.
· Grupo Aval: Contrario a lo que sucede en el Banco de Bogotá, la remuneración para los directivos del holding no es tan alta, es de $2,6 millones por cada sesión de Junta.
Corficolombiana: Es otra de las empresas del Grupo Aval, su remuneración para los directivos es de $2 millones, y está pactada en salarios mínimos.
