San José — Países de Latinoamérica como Chile, Colombia y Panamá tienen camino recorrido en el desarrollo de la tecnología de hidrógeno verde, pero Costa Rica cuenta con una matriz de energía limpia que podría brindarle una ventaja competitiva de la industria.
No obstante actualmente el país se enfrenta a una serie de vacíos normativos que no le permiten avanzar a un ritmo más acelerado, pese al interés de diversas empresas en invertir en esta tecnología.
En diciembre del 2021, el país inició un proceso de construcción de la estrategia nacional del hidrógeno cuyo abordaje país no es únicamente circunscrito al tema energético, sino que también buscaría la inclusión en procesos industriales; velando por integrar todas las iniciativas del sector privado, público, la academia y demás actores involucrados.
La iniciativa ayudaría a llenar los vacíos legales que tiene el país y acelerar el proceso de inversión y producción del hidrógeno verde.
Una de las principales ventajas competitivas que cuenta el país es la matriz eléctrica limpia, su impulso para descarbonizar su economía en las próximas décadas, su experiencia en el ecosistema de hidrógeno y su talento humano.
El país ha liderado el desarrollo de esta tecnología en la región latinoamericana desde el 2010 a través de los esfuerzos de la empresa Ad Astra Rocket Company en la implementación del primer ecosistema de hidrógeno verde para aplicaciones en transporte.
Costa Rica ha ido desarrollando la experiencia de profesionales en hidrógeno verde, lo cual le ofrece la oportunidad de liderar esta transición.
Francisco Urra, jefe de operaciones del BID en Costa Rica.
Juan Guillermo Murillo, coordinador de la Alianza por el Hidrógeno de Costa Rica explicó que si bien el desarrollo del mercado de producción de hidrógeno verde en Costa Rica es aún incipiente, el país ha demostrado que tiene la capacidad técnica, tecnológica y científica para profundizar de manera acelerada este desarrollo.
Para el desarrollo de las tecnologías y el mercado del hidrógeno verde, Costa Rica tiene como principales ventajas su matriz eléctrica limpia, su impulso para descarbonizar su economía en las próximas décadas, su experiencia en el ecosistema de hidrógeno y su talento humano.
Mientras otros países, como parte de sus hitos para la generación del hidrógeno verde, deben preocuparse por la transición de su matriz eléctrica a una basada en energías renovables para suplir la generación de hidrógeno a gran escala, y por ende generar este sin emisiones de carbono, Costa Rica tiene el 99% de sus fuente de energía renovables.
Otro factor que pone al país en la delantera que su sobreoferta energética, que le permite tener excedentes que no están siendo utilizados. En el corto plazo, esta condición puede brindar una gran ventaja para generar proyectos que comiencen a desarrollar el mercado, ya sea interno o de exportación.
Costa Rica fue el primer país Centroamericano en construir una planta piloto de generación y dispensado de hidrógeno lo cual es utilizado en cuatro vehículos livianos de celdas de combustible (FCEV) y en un bus.
“El país ha demostrado experiencia en el desarrollo de proyectos de alta tecnología con altos niveles de complejidad, y sus más de 3.500 graduados universitarios anuales en ingeniería, puede posicionar al país en la industria de producción y manufactura de equipos y tecnologías de hidrógeno verde, tales como electrolizadores, dispensadores, que se podría exportar al igual que lo hace actualmente con la industria médica”, agregó Francisco Urra, jefe de operaciones del BID en Costa Rica.
Legislación
En diciembre del 2021 la Contraloría General de la República advirtió que el proyecto de ley que pretendía impulsar la inversión de hidrógeno verde a través de la exoneración de impuestos durante 15 años carece de estudios.
“En el texto en consulta, no se refiere algún estudio demostrativo de que la industria del hidrógeno verde es viable desde el punto de vista técnico-científico, y de rentabilidad económico”, indica un criterio emitido por la Contraloría.
De acuerdo con la entidad las exoneraciones representan un riesgo para la recaudación fiscal.
Actualmente el país está realizando esfuerzos a través de diversas organizaciones para adelantar camino en el proceso normativo y que las empresas interesadas puedan encontrar en el país las condiciones idílicas para la inversión, producción y experimentación con el hidrógeno verde.
Como parte de sus acciones se está trabajando en desarrollar el “Plan de Acción Interinstitucional para propiciar el uso del hidrógeno en el sector transporte”, también conformó la Comisión de Hidrógeno, se creó el Comité Técnico Nacional de Hidrógeno, para la adecuación de las normas y estándares internacionales técnicos utilizados para el diseño de plantas de generación, almacenamiento, transporte, y distribución de hidrógeno verde.
Adicionalmente cuenta con la Alianza Costarricense por el Hidrógeno, conformada por actores públicos y privados para promover el desarrollo de proyectos de hidrógeno verde. El gobierno de Costa Rica está trabajando en la elaboración de la Estrategia Nacional de Hidrógeno y Plan de Acción.
Inversión y Potencial
Un estudio de la Alianza Costarricense por el Hidrógeno y el Banco Interamericano de Desarrollo demuestra que el aporte que brinda la inversión en hidrógeno verde se ven reflejadas, al 2050, en la generación de 200,000 empleos, aporte al crecimiento económico de 0.3% y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de 13.000 kilotoneladas de CO2 equivalente al año.
Adicionalmente el hidrógeno verde puede atraer empresas extranjeras interesadas en su uso para la fabricación de otros productos con mayor valor agregado, como fertilizantes y acero, con el fin de reducir la huella de carbono de sus operaciones.
Recientemente el gobierno costarricense anunció que al menos tres empresas habrían escogido a Costa Rica como el país ideal para desarrollar sus plantas de hidrógeno verde.
La dependencia del país sobre la importación de productos derivado del petróleo es alta, inclusive representa el 65% del total energético consumido por el país en el año 2019. Lo anterior hace que el país tenga que enfrentarse a constantes cambios y fluctuaciones relacionados con los precios de mercados internacionales.
La generación de hidrógeno con electricidad de fuentes renovables y agua costarricense, ambos recursos abundantes en el país, para su uso en el sector transporte, e industrial, y la elaboración de combustibles sintéticos puede aportar grandes beneficios.
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