Uber Technologies Inc. (UBER) está agregando un cargo por combustible a los viajes y pedidos de comida a domicilio en los Estados Unidos en un intento por aliviar la factura de gasolina de los conductores en medio de precios récord de la gasolina.
Uber aplicará una tarifa de US$0.45 o US$0.55 para viajes y US$0.35 o US$0.45 para pedidos de entrega de Uber Eats durante los próximos 60 días, dijo el viernes la compañía con sede en San Francisco.
El recargo dependerá de la ubicación y la duración del viaje y “el 100% de ese dinero irá directamente a los bolsillos de los trabajadores”, dijo Liza Winship, jefa de operaciones de conductores en Estados Unidos y Canadá. “Nuestra esperanza es que esta medida temporal ayude a aliviar la carga, pero continuaremos escuchando los comentarios y es posible que hagamos cambios en el futuro”.
La invasión rusa de Ucrania inundó el mercado del petróleo con una nueva volatilidad, elevando los precios de la gasolina en los EE. UU. a niveles más altos que durante la crisis financiera de 2008, según la Asociación Estadounidense del Automóvil (AAA). En California, donde los conductores pagan algunos de los precios más altos en la gasolinera, el promedio subió a $5.72, según muestran los datos de la AAA.
La medida de Uber ayuda a brindar algo de alivio a los conductores, quienes han visto sus ganancias reducidas por el aumento en el costo del combustible. Pero los clientes sentirán el pellizco.
Uber dijo que el recargo se implementará en todo el país excepto en la ciudad de Nueva York, donde los conductores ya recibieron un aumento del 5,3% en las ganancias mínimas obligatorias como resultado del aumento de los costos operativos.
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