Bloomberg — El peso mexicano retrocedía el jueves, mientras los activos de riesgo caían en todo el mundo tras el repunte del miércoles, presionados por un dólar más fuerte y el aumento de los rendimientos del Tesoro de Estados Unidos.
El peso mexicano perdía 0,1% a MXN$20,9277 por dólar, su quinta sesión a la baja en seis días. El peso avanzó 2,2% el miércoles, ubicándose entre las monedas de mercados emergentes con mejor desempeño.
El nivel de $21,50, visto por última vez a principios de diciembre, sigue siendo el soporte a corto plazo del peso, que el martes cayó a un mínimo de 2022 de $21,4676.
Alzas adicionales podrían llevar a la moneda a probar el promedio móvil de 100 días de $20,6882, y luego promedio móvil de 50 días de $20,5527.
La volatilidad implícita de un mes de la tasa USD/MXN amplía una caída de tres días a 14,087%. Las tasas swap de TIIE de México reanudaron su avance, subiendo entre 8 y 10 puntos base el jueves, en línea con un peso más débil y los mayores rendimientos del Tesoro de EE.UU.
La curva descuenta alrededor de 270 puntos base de alzas de tasas para fin de año, con siete reuniones de política monetaria programadas. Para este mes, la curva descuenta una probabilidad del 100% de un aumento de tasas de 50 puntos base.
Según los analistas encuestados por Citibanamex, el próximo movimiento de tasas será un alza de 50 puntos base este mes.
La inflación subyacente de México rebasará el 6,7% en marzo después de alcanzar el 6,59% el mes pasado, estimó el miércoles el subgobernador del Banco de México Jonathan Heath, en un par de tuits tras la publicación de los datos del Índice de Precios al Consumidor de febrero.
Los comentarios muestran puntos de vista muy divergentes entre los miembros de la junta de Gobierno de Banxico, según una nota de Citigroup, que dijo que los comentarios en Twitter del subgobernador de Banxico Gerardo Esquivel apuntan a una mayor debilidad económica en México y sugieren que las autoridades no deberían reaccionar mecánicamente a los aumentos de la Fed.
Los comentarios deberían calmar las preocupaciones de un aumento más agresivo de las tasas, escribió Citi.
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