La guerra entre Ucrania y Rusia viene conmocionando a los mercados mundiales, debido a que desató una crisis en el suministro de determinados insumos. En en ese contexto, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas, insistió ante la Unión Europea (UE) para que se relajen las exigencias comunitarias a la hora de importar cereales. Al menos, en forma temporal.
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Si llegase a prosperar el pedido del Gobierno español, Argentina sería uno de los beneficiados, ya que podrían ingresar cereales a territorio comunitario europeo cereales argentinos que hoy tienen la entrada restringida a raíz de determinados residuos fitosanitarios que contienen. También beneficiaría a productos provenientes de Brasil, Estados Unidos y Canadá.
La preocupación de España responde a que el 27% del maíz que se importa desde el país ibérico proviene desde Ucrania. La semana pasada el Gobierno español aseguró que el stock actual alcanzaba para 45 días, pero el tema es muy sensible dado que este cereal es crucial para el forraje porcino, siendo la producción de carnes de cerdos una industria importantísima para España.
- La dimensión: Con US$3,6 mil millones vendidos en 2020, según World’s Top Exports, Ucrania fue en 2020 el quinto exportador mundial de trigo.
Ante esta urgencia, el ministro Planas reclamó mediante un comunicado que se flexibilicen “las medidas de la Política Agrícola Común de la Unión Europea para que se pueda incrementar la producción de cereales” en España y otros países comunitarios.
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¿Puede Argentina aprovechar el hueco?
“Europa está evaluando flexibilizar condiciones de ingreso en biotecnología (para Estados Unidos y Canadá) y en controles en residuos de agroquímicos, lo que beneficiaría a la Argentina. dado que tenemos listados diferentes de autorizaciones para maiz, girasol, entre otras”, resumió a Bloomberg Línea Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de Argentina y del Centro de Exportadores de Cereales.
Por otro lado, Idígoras añadió: “Para Argentina podría ser una oportunidad, pero todo va a depender que el Gobierno reabra los volúmenes de exportación en maíz y trigo”.
Ante la consulta de si esto puede generar faltantes en el plano local, Idígoras aclaró: “El abastecimiento interno está asegurado, porque el Gobierno regula los volúmenes de exportación para que haya más trigo y maíz que lo que necesita para consumo el mercado local”.
El otro país latinoamericano que podría verse beneficiado es Brasil, gracias a eventual levantamiento de barreras para su soja genéticamente modificada. Para ello, deberá prosperar el pedido de España. En la Península Ibérica, de todas formas, saben que recurrir a importaciones que se encuentran del otro lado del Atlántico incrementará los costos de su producción ganadera.
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