Bogotá — De negativa a estable cambió la perspectiva. A su vez, la agencia mantuvo el nivel grado de inversión de la compañía con una calificación Baa3.
“La calificación refleja la estabilidad en la calidad crediticia de la compañía dado el avance del proyecto hidroeléctrico Ituango, superior al 87%, y la reducción de la incertidumbre sobre los daños y costos asociados al proyecto”, compartió Empresas Públicas de Medellín (EPM) tras la decisión de la calificadora.
Pese a los anterior Moody’s reconoce que el desarrollo de Ituango todavía se enfrenta a algunos retos de construcción, como los relacionados con el vertedero y los túneles de desviación de agua, dijo la agencia.
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Moody´s también explicó que tras revisar informes de la Anla y de una empresa consultora, se coincide en estos que “avanzar con las obras del proyecto es la mejor manera de mitigar los riesgos para la estructura física del proyecto y para las comunidades aguas abajo”.
“La afirmación de la calificación, con perspectiva estable, incorpora la diversificación de los ingresos de EPM sobre una base consolidada que incluye flujos de caja predecibles derivados de su negocio regulado de distribución de electricidad, al igual que destaca los pagos por indemnización por parte de las aseguradoras”, dijo EPM.
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A lo anterior, Moody’s aseguró que la afirmación de las calificaciones también considera que EPM recibió indemnizaciones de seguros por coberturas de daños y responsabilidades fiscales durante 2021 y 2022 por un importe aproximado de US$1.100 millones, lo que refuerza la posición de liquidez de la compañía.
Por último reiteró que las calificaciones podrían sufrir una presión a la baja si nuevos incidentes en Ituango causan daños medioambientales adicionales, gastos de responsabilidad civil o daños permanentes e irreversibles en la infraestructura del proyecto.