Santiago — El Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó 0,3% mensual en febrero, menos de la mitad de lo esperado por analistas consultados por Bloomberg (0,7%). Se trata de la menor variación desde junio de 2021. “Es una buena noticia, porque sobre todo en el corto plazo, en este mes, vamos a ver que aumenta la UF, pero no tanto”, dijo el ministro de Hacienda, Rodrigo Cerda.
Pese al sorpresivo dato, la inflación anual se ubicó en un 7,8%, continuando por encima el rango meta del Banco Central y la mayor desde 2008.
Para contralar el incremento del IPC el ente emisor ha ajustado la tasa de interés desde julio, llevándola hasta un 5,5% en su última reunión de política monetaria. La proyección de los analistas de Scotiabank es que alcance 7,5% en las próximas reuniones y permanezca en ese nivel gran parte del año, comenzando un ciclo de recortes entre diciembre o inicios 2023.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) entre las divisiones que reportaron alzas en sus precios destacaron alimentos y bebidas no alcohólicas (1,8%), con 0,358 puntos porcentuales (pp.), y vivienda y servicios básicos (0,9%), con 0,129 pp. En contraste, los precios de recreación y cultura reportaron una fuerte baja (-5,2%), con -0,365 pp. Los retrocesos más fuertes se dieron en paquete turístico (-24,3%) y del transporte aéreo (-17,5%). “Cuando uno quita ciertos precios más volátiles, el IPC o la inercia inflacionaria se mantiene todavía alta. Eso significa que lo que ocurrió con este IPC es que se revirtieron algunos precios volátiles que habían ocurrido el mes pasado, por tanto todavía mantenemos cierta presión inflacionaria”, explicó Cerda.
Según José Manuel Peña, Portfolio Manager en Fintual, la economía chilena está en medio de una transición de una inflación impulsada por la alta disponibilidad de liquidez para consumo a otra derivada de fuerzas externas y costos de insumos como los commodities, particularmente el petróleo. “Esto se ve evidenciado en que las mayores alzas vienen de la mano de ítems como cereales (+3,1%), pan (+3,2%) y carnes (+2,1%), mientras que el sector de recreación y cultura sufrieron descensos relevantes (...) dejando una inflación total que a primera vista puede verse tranquilizadora, pero que debajo muestra este cambio de composición”.
¿Qué esperar en marzo y abril?
La guerra entre Rusia y Ucrania está provocando una presión al alza, principalmente en alimentos y combustibles, factor que puede generar un alza en la inflación en los próximos meses, advierte el Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales (Clapes) de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Un informe de Scotiabank indica que la difusión inflacionaria se mantuvo por sobre rangos históricos en febrero, “claro síntoma de que la inflación está aún lejos de aplacar”. De hecho, el mercado financiero espera que en marzo y abril la inflación mensual sea 0,8% y 0,5%, respectivamente.
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