Impuesto rosa: qué es y cómo afecta a las mujeres argentinas

Un estudio privado indicó que el sobreprecio que abonan las mujeres por algunos productos creció levemente respecto del año pasado

Algunos productos pueden ser más caros simplemente por ser dirigidos a mujeres.
08 de marzo, 2022 | 06:00 AM

Buenos Aires — Las mujeres argentinas pagan en promedio 12% más por productos de similares características e idénticas funcionalidades a los que compran los varones. Se trata de un porcentaje que se mantiene en ese rango hace cinco años, según un relevamiento elaborado por la consultora Focus Market.

El sondeo además calculó que el sobreprecio, también denominado “impuesto rosa”, aumentó levemente respecto del año anterior, cuando se había ubicado en un 11%.

¿Qué es el “impuesto rosa”?

El “impuesto rosa” es “un sistema de fijación de precios” que hace diferencias entre productos y servicios que se basan en el género, explicó la consultora. El término nació en 1992 en Nueva York, cuando la Dirección de Asuntos del Consumidor buscó crear conciencia de la diferencia injustificada que pagan las mujeres en algunos productos.

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En ese sentido, manifestó que allí durante 2020 “se prohibió, al hacer que sea ilegal cobrar más por productos que son ‘sustancialmente similares’, pero que se comercializan para diferentes géneros”.

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La diferencia de precios, según el público

La consultora reportó que en Argentina, en el caso de una colonia para niña de 80 mililitros, el precio es de $522, mientras que para un niño es de $485.

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Entre otros productos, también registró sobreprecio en el perfume para mujer. El frasco de 50 mililitros tiene un costo promedio de $2.226, al tiempo que uno de 60 mililitros destinado a un varón cuesta lo mismo.

En otros casos, la situación se pudo revertir y dejó de haber diferencia de precios. Así sucedió con el desodorante, que en 2018 era un 5,5% más caro para el público femenino y en la actualidad no tiene distinción.

En los últimos años, las diferencias de precios que pagan hombres y mujeres por las mismas categorías y tipología de productos se mantuvieron estables. Sin embargo, las opciones para las mujeres también se han ampliado en la oferta en el mercado, disminuyendo el impacto de sesgo diferencial del color rosa”, consideró Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market.

Por ello, destacó que “el mercado va resolviendo el diferencial en forma gradual y lenta, pero avanzando hacia un mayor equilibrio en el fenómeno en el mercado local”.

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