Bloomberg — La inflación al consumidor turca saltó a un nuevo máximo de dos décadas en febrero, mientras que el aumento de los precios al productor muestra que continuará al alza.
La inflación se aceleró al 54,4% el mes pasado, frente al 48,7% de enero, más que la estimación media del 52,5% de una encuesta de Bloomberg.
Las subidas de los precios al consumidor, que ya están en su nivel más alto desde marzo de 2002, recibirán otro impulso de los productores, donde la inflación superó el 105%, la peor lectura desde 1995. Los precios fueron impulsados por una lira débil y un aumento en el costo de los alimentos y energía. La invasión rusa de Ucrania solo se sumará a esos problemas con los precios mundiales del petróleo muy por encima de las expectativas de los formuladores de políticas para el año.
Los precios al productor marcarán el “camino” para la inflación al consumidor, que se acercará al 60% durante el tercer trimestre, dijo Enver Erkan, economista de Tera Yatirim. La inflación se desacelerará hacia el 45% para fines de 2022, dijo Erkan.
Rendimiento negativo
El banco central de Turquía espera una inflación de fin de año del 23,2%, más de cuatro veces su objetivo, después de que los recortes de tasas en 2021 debilitaran la lira. Pero esa estimación se basó en el petróleo a US$80, el barril. Con los precios del crudo en un máximo de 8 años habiendo superado los US$115, la factura de importación de energía de Turquía aumentará aún más.
Esas son malas noticias para las posibilidades de reelección del presidente Recep Tayyip Erdogan el próximo año, ya que la crisis del costo de vida agota parte del apoyo. Erdogan dijo el martes que la inflación “estará bajo control” para el verano.
Con la promesa del presidente de utilizar la lira más barata para convertir a Turquía en una potencia manufacturera, las subidas de tasas de interés no están en la agenda para frenar las subidas de precios. Los datos del jueves empujaron el rendimiento real de Turquía ajustado por inflación a alrededor del 40% negativo, el más bajo entre sus pares de mercados emergentes.
Eso ya envió la moneda a una caída en picada. Ha bajado más de un 47,2% respecto al año anterior, más que cualquier otra moneda importante rastreada por Bloomberg.
La depreciación de la lira, junto con el repunte de los precios mundiales de las materias primas, provocó un aumento generalizado de los precios el mes pasado. A continuación se muestran los aspectos más destacados del informe de inflación publicado por Turkstat:
- Los precios al productor aumentaron 7,2% durante el mes, elevando la inflación anual a 105%
- La tasa de inflación en energía se situó en 83% desde 76,4% en enero, liderada por los costos de gasolina y energía. Turquía ha recortado recientemente los impuestos sobre el consumo de energía de los hogares, pero el impacto solo se verá a partir de marzo.
- Las ganancias anuales de los precios de los alimentos, que representan aproximadamente una cuarta parte de la canasta de consumo, se aceleraron del 55,6 % al 64,5 %, incluso después de que el gobierno redujera los impuestos sobre los alimentos.
- Un índice de inflación subyacente, que elimina el impacto de artículos volátiles como alimentos, energía y oro, subió a 44,1% desde 39,5% en enero.
Lo que dicen los economistas
La guerra en Ucrania está agregando presión sobre los costos de financiamiento externo y la moneda de Turquía, dijo Gizem Oztok Altinsac, economista jefe de la Asociación de Industria y Negocios de Turquía, antes de los datos del jueves. “Habíamos predicho antes de la crisis de Ucrania que la inflación turca tocaría 60% en mayo o Junio. Ahora, han surgido riesgos al alza en nuestro pronóstico”, dijo.
Subiendo
Los datos del presupuesto del gobierno central se publicarán el 15 de marzo. La próxima reunión de fijación de tasas del banco central está programada para el 17 de marzo.
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Este artículo fue traducido por Miriam Salazar
