Bogotá — En 2021 el crecimiento económico estuvo impulsado en gran parte por el consumo de los hogares que aprovecharon para gastar lo que no pudieron o lograron ahorrar obligatoriamente en el año de la crisis. En 2022 el crecimiento se moderará, el consumo también y la inflación sigue para arriba, un mix que podría afectar a la economía.
Para poner en contexto, en 2021 el gasto de consumo final creció 14,1%, mientras que en 2020 se contrajo 4,2% anual. El año pasado el consumo de los hogares creció 14,6% y el del Gobierno lo hizo en 12,1%, cifras significativas para la recuperación del PIB en 2021, según datos del Dane.
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Sin embargo, el alto nivel de los precios que se está viendo en Colombia tras el repunte inflacionario podría hacer que los hogares compren estrictamente lo necesario y ajusten sus presupuestos, por lo cual el consumo no sería tan representativo como el que se vio en 2021.
Ante este panorama, Bloomberg Línea consultó a expertos para saber qué tanto la alta inflación -que llegó a 6,94% en enero y tocaría 8% en febrero- podría impactar el consumo y por esta vía ralentizar el crecimiento económico previsto para 2022, que según algunos analistas podría ser superior al 5%.
¿Puede la inflación pasarle factura al crecimiento económico de 2022?
“Para este año se espera que el consumo se desacelere un poco a niveles de más largo plazo y más sostenibles, eso no quiere decir que sea malo, pero se va a notar una desaceleración, especialmente porque en 2021 se vio un exceso de desahorro del mismo ahorro obligatorio que se dio en 2020 por efectos de las medidas tomadas por la pandemia”, explicó Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria.
Sin embargo, Olarte agregó que dado que se prevé una mejora en el mercado laboral este año, es posible que el consumo de los hogares vuelva a niveles más cercanos a lo acostumbrado, entre 3% y 4% de crecimiento.
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Desde la visión de Laura Parra, analista de economía de Corficolombiana, el consumo en el último trimestre de 2021 estuvo impulsado por los tres días sin IVA y la temporada de vacaciones y decembrina. No obstante, esos elementos se disiparán en el primer trimestre y la inflación continuará aumentando, por lo cual al menos en la primera parte del año sí hay señales de moderación en esta fuente de crecimiento.
Olarte añadió que aunque el consumo se moderará en 2021, “la inversión sería el motor de crecimiento de la economía durante este año, llegando a niveles por encima del 6%, haciendo que la economía como un todo crezca cercana al 4,5% en 2022″.
Más allá de la inflación...
Pero no solo el repunte en los precios podría impactar el crecimiento económico de 2022, de acuerdo con Laura Parra, “hay otros desafíos que están relacionados con la inflación como el aumento de los costos de producción -por disrupciones continuas en la oferta y por aumento en el costo de la nómina-, la devaluación del tipo de cambio, y el ciclo de aumentos que hará el Banco de la Republica. A esto se le suma la incertidumbre por el ciclo electoral”.
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Agregando a lo que Olarte había mencionado de lo clave que será la inversión en 2022, el experto comentó que hay varios riesgos que pospondrían las decisiones de inversión de los agentes: tasas de cambio todavía muy altas, sumado a la incertidumbre política a nivel nacional y la geopolítica a nivel internacional. Ello haría que la inversión no se reactive como se espera, especialmente en sectores de la minería, el petróleo y la construcción.
