Bogotá — Indígenas colombianos alistan un boicot contra Coca-Cola en varios de sus territorios para defender sus marcas, luego de que la multinacional estadounidense reclamara a un emprendimiento de la comunidad Nasa por el uso de la palabra coca en sus cervezas artesanales.
La cerveza a base de coca, llamada Coca Pola, generó un choque entre las comunidades indígenas del suroeste del país con el gigante de las bebidas Coca-Cola.
Los reclamos de Coca-Cola “son una torpeza producto de la arrogancia, una empresa que literalmente se cree la dueña del mundo más o menos y comete una ligereza como esta. Se olvida no solo de las realidades socioeconómicas, sino que además es una pretensión de dominio de todo”, dijo a Bloomberg Línea David Curtidor, cofundador Coca Nasa.
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Esta empresa comenzó a finales de la década de los 90 por iniciativa de su esposa, Fabiola Piñacué, quien siendo estudiante en Bogotá quiso hacer frente a los estigmas que aún pesan contra la hoja de coca, considerado un producto ancestral por los pueblos indígenas.
La empresa de esta pareja de empresarios de orígenes Nasa comenzó con la fabricación de aromáticas a base de hoja de coca, pero luego diversificaron su modelo y comenzaron a comercializar desde bebidas energizantes, hasta cerveza artesanal y pomadas.
David Curtidor recuerda que el primer contacto que tuvieron de la multinacional de bebidas se dio en el 2007, por cuenta de su bebida energética natural Coca Sek. Los reclamos de Coca-Cola se retomaron en diciembre pasado cuando recibieron una carta en la que “conminaban”- según el propio David Curtidor- a dejar de usar la palabra coca.
“Se van a estrellar porque la pelea que vamos a dar va a ser fuerte y ya no solo somos nosotros como Coca Nasa, sino que son las organizaciones indígenas nacionales las que están dispuestas a enfrentarla y hacer respetar los derechos”, mencionó.
Las comunidades Nasa y Embera Chamí publicaron una carta en la que adelantan que impondrán medidas judiciales y comerciales en contra de la compañía, a la que le han pedido a su vez explicaciones por el “uso no consentido” de la marca Coca-Cola, según lo divulgó AFP.
Los indígenas defienden que la planta es de uso sagrado y es propiedad de sus pueblos, por lo que las organizaciones darán una respuesta colectiva con un boicot a sus productos, como ya ocurrió hace unos años en el departamento del Cauca como apoyo a los sindicalistas de la región.
Desde Coca Nasa indicaron que desde la comunicación de diciembre no han recibido más contactos por parte de Coca-Cola, que no respondió a un contacto de Bloomberg Línea a su agencia de comunicaciones. Asimismo, tampoco obtuvo respuesta inmediata a una consulta a Brigard Castro, que representa a la multinacional en este caso.
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En la carta “amenazan con que en diez días iniciarían acciones legales. Nos quedamos esperando y nunca las llevaron a efecto. Entonces las autoridades indígenas se reúnen y ahora han decidido el apoyo a Coca Nasa”.
Las comunidades defienden que sus productos están avalados y protegidos por las autoridades indígenas del país, por lo que debe respetarse su figura.
Según los resultados del Censo Nacional de Población y Vivienda 2018, en el país hay más de 1,9 millones de personas que se autorreconocen como parte de la población indígena, un crecimiento del 36,8% frente a 2005.
Se estima que en Colombia hay 115 pueblos nativos en el país, mientras que en 2005 se había identificado 93, según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
Las hectáreas sembradas de hoja de coca totalizaron en 2020 en Colombia 143.000, un 7% menos frente al 2019.
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