Bloomberg — El lanzamiento de la política sobre criptomonedas del presidente de EE.UU., Joe Biden, se retrasó por una disputa entre los funcionarios de la Casa Blanca y la secretaria del Tesoro Janet Yellen sobre el alcance de una orden ejecutiva pendiente que podría incluir un dólar digital, según personas familiarizadas con el asunto.
Se esperaba que la orden, destinada a establecer una estrategia gubernamental para los activos digitales, se firmara a principios de año, pero la disputa entre el personal de Yellen y los funcionarios del Consejo Económico Nacional ralentizó su progreso, dijeron estas personas, que hablaron bajo condición de anonimato. Altos funcionarios de la administración han completado ahora un borrador que está listo para la consideración de Biden, aunque la acción posterior podría retrasarse debido a la crisis de Ucrania.
Yellen considera innecesario el plan de una orden ejecutiva, en particular cualquier mención a un dólar digital emitido por el banco central, según dos de las personas. La jefa del Tesoro y su equipo dicen que la Reserva Federal, que publicó un informe el mes pasado, todavía está trabajando en el tema y que se le debe dar espacio para desarrollar su pensamiento. Su equipo también ha expresado a la Casa Blanca que el Tesoro y los reguladores federales, incluida la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), han estado haciendo progresos para proporcionar a la industria más claridad sobre las normas estadounidenses en torno a las monedas virtuales.
El portavoz del departamento del Tesoro, John Rizzo, dijo que la descripción “es inexacta”, sin abordar directamente el involucramiento de Yellen con la Casa Blanca en la redacción de la orden. “El Tesoro sigue trabajando estrechamente con nuestros socios en toda la administración y en la Casa Blanca”, dijo. Un portavoz de la Casa Blanca también dijo que la administración está unida en su trabajo en la política de activos digitales.
Las agencias federales han adoptado un enfoque disperso a la hora de abordar los activos digitales en los últimos años y el equipo de Biden se enfrenta a la presión de liderar la cuestión. Los ejecutivos del sector suelen lamentar la falta de claridad de las normas estadounidenses y a otros les preocupa que la adopción por parte de China y otros países de monedas respaldadas por el gobierno pueda amenazar el dominio del dólar.
Los funcionarios de la Casa Blanca comenzaron a trabajar en la centralización de su estrategia general para las criptodivisas en agosto.
Los reguladores financieros nombrados por Biden están adoptando una postura cada vez más dura con respecto al mercado de las criptomonedas, ya que pretenden intensificar la supervisión de esta clase de activos. Los reguladores han expresado su preocupación por la falta de protección de los inversores y los posibles riesgos para la estabilidad financiera a medida que el mercado se ha disparado a más de US$2 billones, incluso en las minutas de la reunión de enero de la Fed que se publicaron el miércoles.
Las agencias de seguridad nacional de la administración también están lidiando con casos de alto perfil de monedas digitales que juegan un papel en los ataques de ransomware como el episodio de Colonial Pipeline el año pasado.
Según informó Bloomberg News el mes pasado, un borrador de la orden ejecutiva en su última fase detalla los retos económicos, regulatorios y de seguridad nacional que plantean las criptodivisas. Se pide que los informes de varias agencias se presenten en la segunda mitad de 2022.
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