Datos oficiales: ¿cuánto invierten los argentinos a través de Uruguay?

El Banco Central de Uruguay dio a conocer los activos bajo el manejo de asesores de inversión y gestores de portafolio en el país vecino en 2020

Por

Buenos Aires — Motivados por motivos fiscales, cambiarios y de estabilidad regulatoria, los argentinos han acudido tradicionalmente al Uruguay para canalizar sus inversiones.

Así es que unos 18.850 argentinos contaban con un total de US$16.416 millones invertidos a través de asesores de inversión y gestores de portafolio en Uruguay en 2020, según datos oficiales difundidos esta semana por el Banco Central de Uruguay.

      • Dimensionando: Se trata de un monto que se aproxima a los US$19.200 en vencimientos de interés y capital que deberá afrontar la Argentina este 2022 en caso de no sellar un acuerdo para refinanciar su deuda con el organismo.
      • Aclaración: No necesariamente todo el dinero pasa por Uruguay, según informó el diario uruguayo El Observador, ya que en la mayoría de los casos el asesoramiento se realiza desde ese país, pero el capital va hacia otros destinos.

El Banco Central del Uruguay (BCU) informó que los argentinos representaron 69% del un total de 27.473 clientes, incluyendo a uruguayos, que invertían a través de los 155 asesores y gestores registrados en el país vecino ese año. El total de activos bajo el manejo de estos gestores alcanzó los US$ 28.886 millones, según publicó El Observador.

Los residentes uruguayos eran 3.710 y contaban con inversiones por US$2.418 millones, seguidos por 1.386 brasileños, con activos por US$1.572 millones.

Los clientes con residencia en el resto de los países eran 3.527, y reportaron inversiones por US$8.478 millones, según los datos de la autoridad monetaria publicados por el matutino montevideano.

      • Los activos más elegidos: Dentro de los productos gestionados, los fondos de inversión representaron la mayoría y totalizaron en 2020 US$ 11.885 millones, más de un tercio del toral. Los bonos, por su parte sumaron US$ 8.510 millones.

El resto se repartió entre instrumentos vinculados a índices de acciones, otros instrumentos de renta variable, derivados, productos estructurados y otros instrumentos, según consigno El Observador.