Bloomberg — Una escasez de oferta que eleva los precios del gas natural llevó el costo de las licencias de polución en Europa a un nuevo récord.
Los futuros de carbono superaron los 97 euros (US$111) la tonelada y se acercan rápidamente a la marca de los 100 euros que muchos fondos de cobertura y analistas habían pronosticado el año pasado. El alza de los precios del gas obliga a las empresas generadoras de electricidad europeas a quemar más carbón sucio para garantizar el suministro durante el invierno, lo que aumenta la demanda de licencias de polución.
Europa está lidiando con una crisis energética al tiempo que los suministros rusos siguen siendo limitados y las tensiones sobre Ucrania se intensifican. Los flujos más bajos del principal proveedor de Europa coinciden con la llegada de temperaturas más frías en partes del continente. Hasta ahora, las temperaturas relativamente suaves en el continente han permitido evitar las peores proyecciones sobre la crisis energética, que contemplaban apagones continuos y cierres de fábricas.
“El carbono sigue atrayendo mucho interés especulativo de compra dado su estímulo y la voluntad política de que se valorice y acabe con el carbón, dando paso al impulso hacia las energías renovables”, dijo Ole Hansen, director de estrategia de materias primas de Saxo Bank A/S.
Cada vez es más caro producir electricidad por el alza de los precios del gas. El suministro de gas ruso a través de una ruta clave que cruza Ucrania repuntó el viernes, según datos de la red, pero siguen por debajo de los niveles normales. El suministro de gas a Alemania a través del gasoducto Yamal-Europa sigue detenido. El flujo está actualmente en la dirección opuesta a la normal.
La gigante rusa Gazprom PJSC dijo que la reducción en los flujos es el resultado de menores solicitudes de compradores europeos bajo contratos a largo plazo debido a los altos precios. Sin embargo, la empresa no ha ofrecido suministro adicional a la venta en el mercado spot hace meses.
Además de la presión sobre los precios, no hay señales de una desescalada en las fronteras de Ucrania, lo que genera nerviosismo para los operadores de energía en Europa.
El precio del gas europeo se triplicó con creces el año pasado, aumentando el costo de las licencias de contaminación. El precio del carbono también ha subido por el movimiento de los fondos de cobertura, que apuestan por un aumento de los precios. El fuerte aumento del carbono ha generado preocupaciones políticas sobre una posible manipulación del mercado, y algunos legisladores buscan frenar el papel de los inversionistas especulativos en el mercado de carbono de la UE.
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