QUITO — Ecuador quiere dar un giro a su visión petrolera y para ello apostará por los consorcios o joint venture. El propósito es acelerar el aumento de producción con inversión extranjera pero sin dejar de ser parte de la operación. Aquello se aplicará tanto en pozos petroleros como en la industria de gas natural. El año pasado, el país cerró con una producción diaria de 429 mil barriles de petróleo, la meta es llegar al millón.
El gerente de la empresa estatal Petroecuador, Ítalo Cedeño, explicó a la prensa las proyecciones y planes para 2022, entre los que está licitar 22 campos petroleros, hacer ventas spot de crudo permanentes, renegociar la deuda petrolera con China y empezar la explotación en los campos más importantes del país.
22 CAMPOS PETROLEROS EN CONSORCIO
Los 22 campos petroleros que se licitarán a través de consorcio o joint venture producen un total de 83.000 barriles diarios de petróleo. El objetivo de utilizar la figura de consorcio es que el país no deje de intervenir en el proceso de producción. Estos campos se encuentran actualmente en manos de Petroecuador y han sido entregados al Ministerio de Energía y Recursos No Renovables para que puedan ser ofertados en rondas petroleras.
“Esos 22 campos que le entregamos al Ministerio para los procesos de licitación internacional van a incrementar su producción porque van a tener inversión fresca, nueva tecnología y nosotros aspiramos a estar, como operador o no operador, pero con una actividad permanente”, aseguró Cedeño.
Al momento se están elaborando los documentos para la licitación bajo consorcio o como contrato de participación, que es otra figura legalmente permitida en el país. “Queremos asociarnos con todas las empresas y que Petroecuador, aunque no sea el operador de un campo, sea siempre un socio. Podemos llegar a cosas muy grandes con la empresa privada, con inversión nacional o extranjera para incrementar la producción hasta el límite”, agregó Cedeño.
En ese sentido, insistió en que Petroecuador siempre participará como asociado, siendo parte de “toda la operación petrolera aunque no seamos operadores”, pues “esto nos permitirá que nuestra gente se esté permanentemente entrenando en la mejor tecnología disponible en el mundo”.
Bajo el mismo concepto se espera la participación de la empresa privada en el campo Sacha, el de mayor proyección petrolera del país. “Sacha tiene mucho potencial y tenemos que darle toda la capacidad de producir este petróleo que tiene características de campo gigantesco”.
Cedeño recordó que el Ecuador no puede utilizar la figura de concesión petrolera, pero sí otras como el contrato de prestación de servicios, el contrato de participación o el de producción compartida, donde “el socio privado da la tecnología y participa con una parte del petróleo crudo que se produce”.
Para el titular de Petroecuador, el contrato de participación “es el mejor” de todos porque funciona en cualquier escenario de precios del crudo. “En los otros contratos, cuando el precio de petróleo es bajo no se alcanza a pagar una tarifa y al no alcanzarse se transforma en una acumulación y el Ecuador se endeuda”.
INCREMENTO DE PRODUCCIÓN
De acuerdo con Petroecuador, en 2021 la tendencia declinante de producción se vio agravada por el problema con los oleoductos en diciembre, que se vieron amenazados tras la erosión del Río Coca. Sin embargo, “esta tendencia la hemos revertido y estamos en franca recuperación de la producción”, aclaró el gerente de la estatal al tiempo de anotar que para 2022 se irá “continuamente incrementando la producción con las herramientas actuales”.
La meta de este año es lograr 425.000 barriles por día, “pero es una meta con las herramientas que disponemos en enero de 2022, por eso estamos preparando un plan estratégico” que se enfocará especialmente en la inversión privada. “Con las empresas vamos a firmar joint ventures para producir nuestro petróleo de mejor manera, no hay alternativa, o producimos petróleo ahora o no lo recobramos nunca”, enfatizó Cedeño.
Además, destacó la necesidad de alcanzar “un incremento sostenido, agresivo, demandante de la producción petrolera del Ecuador” porque “no podemos dejar ese recurso en el subsuelo. O lo producimos ahora o no lo produciremos nunca más por el cambio a energía renovable”.
La ambición del Gobierno es duplicar la producción de crudo y llegar al millón de barriles por día.
VENTAS SPOT PERMANENTES
Otra de las estrategias del Gobierno para impulsar los ingresos petroleros y revalorizar su crudo es apostar por las ventas de crudo permanente o spot para posicionar el petróleo ecuatoriano en el mercado internacional. “Esto es muy importante porque el crudo es apetecido por refinerías de alta conversión, tenemos que mantenernos haciendo ventas para que nuestro crudo sea reconocido en su exacto valor de mercado”.
Asimismo, el gerente de Petroecuador afirmó que el país cumplirá con las obligaciones contractuales con las empresas con las que se tiene contratos a largo plazo.
Está previsto que al menos el 10% de los excedentes de la producción de crudo se destinen al mercado spot. También se aspira realizar a mediados de año dos concursos para la exportación de crudo Oriente y Napo, que son las dos categorías de petróleo nacional.