Bloomberg Línea Ideas — Inclusión, democratización e impacto. Estos son algunos de los cambios fundamentales que está impulsando la próxima generación de startups en el mundo, especialmente las que vienen de América Latina, por lo que hoy es el mejor momento para lanzar, o unirse, a una startup.
Recientemente moderé una serie de masterclasses para ayudar a prepararse a una nueva generación de operadores para trabajar en empresas tecnológicas de nueva creación. En esta serie de encuentros, destacados emprendedores y operadores compartieron sus consejos sobre todo tipo de temas, desde el lanzamiento de una startup hasta la creación de un equipo y la expansión a nuevos mercados.
En la primera sesión, Shu Nyatta, socio director de SoftBank Group International, compartió su opinión sobre tres cambios fundamentales en el espíritu emprendedor y por qué están haciendo de éste el mejor momento para lanzar una startup tecnológica.
He aquí algunos puntos relevantes de los que habló:
- Pasar de la disrupción a la inclusión: En lugar de hacer desaparecer a otras empresas, la nueva ola de startups, especialmente en América Latina, se enfoca en llevar productos y servicios a mercados desatendidos y permitir que más personas participen en la economía global. La fintech Klarna, por ejemplo, está permitiendo que más personas compren cosas de forma asequible; el gigante del delivery Rappi está ayudando a restaurantes y otros negocios a expandir su cobertura; y Banco Inter, Konfio y Creditas están ampliando el acceso a los servicios financieros.
- Una transición de lo elitista a lo democrático: Antes se necesitaba mucho dinero para lanzar una startup. Ahora, cualquiera puede lanzar una startup desde cualquier parte del mundo, a un costo mucho menor, independientemente de su origen o sus redes. Además, con las cantidades récord de capital de riesgo que se están invirtiendo, las startups tienen más acceso al financiamiento que nunca antes.
- Pasar de lo restringido a lo más extenso: Durante mucho tiempo, la tecnología implicaba que las startups se centraran en el comercio minorista o la publicidad. Ahora, las startups tecnológicas abarcan todos los sectores ( la salud, la educación, la logística, etc.).
Otras clases magistrales incluyeron al cofundador de Rappi, Sebastián Mejía, que compartió su punto de vista sobre por qué la cultura de las startups es tan importante. En otra, Claudia Woods, CEO de WeWork LatAm, habló sobre cómo establecer KPIs y objetivos. Además, Carlos García, cofundador de Kavak, habló sobre cómo dominar el storytelling. El ciclo se cerró con Meltem Demirors, director de Estrategia de CoinShares, quien habló de que las criptomonedas se están convirtiendo en una industria de US$100 billones y de cómo la Web 3.0 volverá a revolucionar el mundo.
Todo esto coincide con lo que he visto en mi carrera. Yo fundé mi primera empresa cuando tenía 15 años. Se trataba de una fábrica de queso y yogur que funcionaba en la granja de mis padres en mi país natal, Colombia.
Aquella primera iniciativa me condujo a una trayectoria de toda la vida en el ámbito del emprendimiento tecnológico, incluida una “fintech” lanzada en 2006, creada para democratizar el acceso a los servicios financieros a través de plataformas como el crowdfunding.
Al final vendí la empresa, obtuve una maestría en el MIT y llegué a la conclusión de que la mejor manera de tener un efecto multiplicador sería uniéndome a plataformas globales que permitieran a los fundadores crecer y escalar. Decidí unirme a Citibank y me convertí en Jefa Global de Aceleración Fintech y luego pasé a ser Jefa de Aceleración en TheVentureCity y Emprendedora Residente en el IDB Lab, para finalmente conseguir mi trabajo actual donde ayudo a los fundadores a encontrar la mejor manera de acelerar el crecimiento de sus startups.
Los mejores emprendedores son eternos aprendices con una curiosidad insaciable y deseosos de aprender de otros que se han enfrentado a retos similares. Lecciones como estas deberían desencadenar algo en los próximos emprendedores que haga que su viaje parezca más posible o les inspire una idea que quieran perseguir.
Este texto no refleja necesariamente la opinión de los consejos editoriales de Bloomberg Línea o Bloomberg LP y sus propietarios.