QUITO — El 93,2% de energía que generó el Ecuador en 2021 fue renovable, basada principalmente en recursos hídricos por la operación continua de centrales hidroeléctricas como Coca Codo Sinclair, Paute, Sopladora, Minas San Francisco, Delsitanisagua, entre otras.
Eso significó que el uso de combustibles fósiles para producción energética disminuyera de forma considerable, alcanzando mínimos históricos, informó este viernes el Ministerio de Energía y Recursos Naturales No Renovables.
Asimismo, la demanda anual de electricidad aumentó en 2021 en un 6% gracias a la recuperación y dinamización de las actividades productivas del país. Durante ese periodo, según datos del Operador Nacional de Electricidad (Cenace), la producción de energía en el Ecuador alcanzó los 27.659 GWh (gigavatio hora).
El aumento de producción le permitió al país exportar 522,87 GWh. De esa cifra, se vendieron 479,44 GWh a Colombia y 43,43 GWh a Perú, con lo que se registraron ingresos por alrededor de US$ 15 millones para el Estado.
La meta del Gobierno nacional es impulsar aún más las energías renovables, para lo que existe un Plan Maestro de Electricidad (PME) actualizado hasta 2031 que incentiva la ejecución de proyectos fotovoltaicos, eólicos, geotérmicos, biomasa, entre otros, para cubrir la demanda de energía en el corto, mediano y largo plazo.
“La meta es garantizar el abastecimiento de la demanda de energía eléctrica en los próximos años, priorizando el aprovechamiento de los recursos renovables, como fuentes eólicas, fotovoltaicas, biomasa”, indicó la cartera de Estado.
Para ello, en 2021 se lanzó el proceso público de selección para el Bloque de Energías Renovables No Convencionales de 500 MW (megavatios), un Bloque Ciclo Combinado Gas Natural que tendrá una potencia 400 MW, y el Sistema de Transmisión Nororiental. Estos requerirán una inversión privada de US$ 1.861 millones.
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